La desaceleración económica en el país durante el 2023 se sintió con mayor fuerza en sectores como el de la construcción. Un impacto que en el caso de Cali y el Valle fue más grave debido a los cambios que el actual Gobierno Nacional hizo a los programas de subsidio para vivienda de interés social e interés prioritario, lo que llevó a que disminuyera el número de beneficiados en la región y que con ello se afectara la realización de nuevos proyectos habitacionales.
De ahí la importancia que tienen las iniciativas locales y departamentales con las que se busca brindar auxilios de vivienda a un mayor número de familias y de paso ayudar a la reactivación de la construcción, que es además una de las fuentes más importantes de generación de empleo. A falta de subsidios de ‘Mi Casa Ya’, el plan que financia la Nación, bienvenidas propuestas como ‘Casa Mía’ con la que el municipio espera beneficiar a 8.500 familias caleñas en los próximos tres años.
Para este 2024 a Cali le fueron asignados 157 cupos del programa ‘Mi Casa Ya’, un número ínfimo si se tiene en cuenta que en la ciudad hay al menos 250.000 posibles interesados en adquirir vivienda. Para el departamento se entregarán 2.227 auxilios, lo que constituye una reducción de cerca de 8.200 subsidios si se compara con los del año inmediatamente anterior.
En la capital el Valle la demanda de vivienda de interés social, VIS, y de vivienda de interés prioritario, VIP, representa cerca del 80%. Si la población de más escasos recursos no tiene posibilidad de acceder a las ayudas del Estado, las ventas de unidades habitacionales disminuyen y se frenan los nuevos proyectos de construcción, como ocurrió en el 2023, cuando esas cifras se redujeron en un 67% y un 65% respectivamente. Al ser uno de los sectores que más genera puestos de trabajo, el impacto sobre los índices de desempleo es directo, con los efectos que ello tiene sobre la economía local.
Se espera, entonces, que los programas impulsados desde la Alcaldía y el Gobierno Departamental, que cuentan con el apoyo de gremios como Camacol, y buscan entregar más de auxilios para vivienda VIS y VIP para así reducir el déficit habitacional, den resultados positivos. En esa labor tiene una tarea importante el sector financiero, que deberá facilitar el acceso a los créditos hipotecarios para que más familias tengan una oportunidad real de adquirir su casa propia.
Darle un impulso a la construcción en Cali y el Valle será fundamental para cumplir con las metas de creación de empleos nuevos. Se calcula que gracias a ‘Casa Mía’, en los próximos años el sector podrá abrir 6000 plazas para mano de obra, lo que sumará al propósito local de generar en ese periodo 100.000 puestos de trabajo más.
Ya se sabe que las regiones no pueden sentarse a esperar las ayudas que desde este Gobierno Nacional se prometen y en muchos casos no llegan. Es la gestión propia la que permitirá que los proyectos de desarrollo se puedan adelantar, para que se conviertan en oportunidades de progreso para su sociedad.