Mañana termina el 2017 y se espera que los caleños reciban el nuevo año con tranquilidad y en armonía al lado de sus familias, amigos y allegados.
En la fiesta de despida del año deben relucir la alegría y la diversión que caracterizan a quienes viven en la capital del Valle, pero ante todo deben primar la tolerancia y la sana convivencia.
Esta es una fecha la prudencia y la sensatez son las mejores aliadas para que no se presenten desórdenes ni hechos que se tengan que lamentar.
El compromiso de todos debe ser por el respeto a la vida y a la integridad de los demás, siempre acompañados por las autoridades, que son las encargadas de mantener el orden y la tranquilidad en la ciudad.
De nuevo hay que hacer un llamado para evitar el uso de la pólvora, que está prohibida en la ciudad, en todos los municipios del departamento del Valle y en el territorio nacional.
En este diciembre van 411 víctimas en el país -183 de ellos menores de edad-, de los cuales el Valle ha aportado 44 personas quemadas, lo que lo ubica como el segundo departamento con mayor número de quemados. Evitar que el año comience con una tragedia por cuenta de la pólvora es un deber que concierne a todos.
El deseo es para que los caleños y vallecaucaucanos reciban el 2018 de forma sana y alegre, y demuestren que sí es posible celebrar en paz y con respeto hacia los demás.