En los últimos años, el terror se ha tomado las noches de Halloween en Cali y no precisamente por las celebraciones, sino a causa de los desmanes que generan algunos grupos de motociclistas, que perturban la tranquilidad de los caleños.

Así se incumplen las normas de tránsito, se obstruyen vías importantes de la ciudad como el túnel de la Avenida Colombia y se pone en riesgo la vida del resto de ciudadanos que circulan por la ciudad.

Además, entre disfraces se camuflan los delincuentes para atentar contra propiedades privadas, establecimientos de comercio, e imponer el desorden en la ciudad.

Por ejemplo, el 31 de octubre de 2022, las autoridades impusieron 1200 comparendos y 200 vehículos terminaron inmovilizados, el 60% fueron motocicletas que no portaban su placa.

Por eso, Cali está alerta máxima, según informaron las autoridades, quienes se han comprometido con extremar las medidas de seguridad y movilidad y acompañar esta caravana para que transcurra en normalidad.

Para lograrlo es necesario apelar a la conciencia y la convivencia de los caleños, y garantizar que esta festividad no termine empañada.

También, que los padres de familia se comprometan con el cuidado y la protección de los menores.

Hay que recordar que halloween es una celebración familiar, especial para los niños quienes con fantasía esperan este día para celebrar entre dulces, cantos y juegos.