En Cali hay quienes no reconocen la importancia ambiental de los cerros tutelares, y en lugar de cuidarlos y protegerlos, los destruyen cada vez más.
Ahora, a las invasiones ilegales e incendios forestales, que tanto daño hacen a estos espacios verdes de Cali, se suma una amenaza nueva: los motocrosistas que volvieron los cerros, su zona de práctica.
Por medio de una denuncia recibida por El País, se conoció que varios grupos de motocross realizan sus recorridos en el sector de El Faro, los cerros Piedra Grande, Los Cristales y las Tres Cruces.
Estos estarían ocasionando graves daños como deforestación y afectaciones en el ecosistema, además, de la contaminación de las fuentes hídricas que abastecen a más de 4000 familias en estas zonas.
También, la fauna estaría sufriendo las consecuencias del exceso de ruido de esta actividad, y se encuentran bajo riesgo para movilizarse por su ecosistema, ahora que las motos lo han invadido.
Ante la denuncia de la comunidad, que se ha sentido amedrentada tras intentar dialogar con estas personas, solo queda que se desarrollen acciones contundentes de las autoridades ambientales y de seguridad para garantizar los derechos de los habitantes, así como de los ecosistemas que enriquecen a Cali.
Sobre todo, es necesario fortalecer la conciencia ciudadana en torno al cuidado de estos gigantes pulmones, encargados de mejorar la calidad del aire y conservar la biodiversidad.