Arriesgando sus vidas, haciendo acrobacias y con el peligro de caer al vacío aproximadamente 2000 estudiantes caleños intentan pasar diariamente por el puente peatonal ubicado frente al colegio Isaías Duarte Calcino, cuya base pende de una reja.

El deterioro de los puentes peatonales en Cali es cada vez peor, como lo demuestran las condiciones lamentables en las que se encuentran la mayoría de ellos.

Frente la grave situación, la respuesta de la Secretaría de Infraestructura es mínima: el año pasado se comprometió a intervenir apenas 16 de esas infraestructuras, una cifra mínima para la magnitud del problema.

Mientras tanto el riesgo es para miles de caleños, entre ellos niños, mujeres en estado de embarazo o con bebés en brazos, personas en condición de discapacidad y ancianos.

Ya no se sabe qué es más peligroso, si utilizarlos o no, o si jugarse la vida cruzando las avenidas y autopistas de alta velocidad o pasar con tanta precariedad sobre canales y ríos.

Hay que exigir por ello que los puentes peatonales sean intervenidos.

Y que se resuelva de una vez la situación para los estudiantes de la Institución Isaías Duarte Calcino, a quienes les urge que las dependencias del Municipio les garanticen condiciones para ir al colegio y transitar de manera segura por el sector.