Después de que SEMANA hiciera públicos los escandalosos audios en los que Óscar Iván Zuluaga confiesa haber recibido financiamiento ilegal de la empresa Odebrecht para su campaña presidencial en 2014, una crisis se desató dentro del Centro Democrático, el partido que respaldó su candidatura en aquel entonces.
En un comunicado oficial, el Centro Democrático anunció la renuncia de Zuluaga: “Como consecuencia de hechos que son de público conocimiento, el doctor Óscar Iván Zuluaga ha renunciado al Centro Democrático. Aceptamos su decisión y reconocemos el sentimiento y la indignación de nuestros militantes y de muchos colombianos ante lo sucedido”.
“El partido afronta esta decisión tan compleja con total entereza. Nuestro líder, el presidente Álvaro Uribe, expresó claramente los hechos hasta donde conocimos”, agrega el pronunciamiento del colectivo.
Finalmente, señalaron que “la justicia tiene la responsabilidad con los colombianos de clarificar todas las dudas y los gravísimos cuestionamientos que recaen sobre la financiación de las campañas presidenciales del 2014, 2018 y la actual del 2022″.
Los audios de Óscar Iván Zuluaga
Dos archivos de audio de 59 y 43 minutos son la evidencia principal que tiene la Fiscalía contra el exaspirante presidencial Óscar Iván Zuluaga por la recepción de fondos de Odebrecht en su campaña de 2014. En una exclusiva de SEMANA, se revela el contenido de ambas grabaciones, las cuales constituyen prácticamente una confesión de Zuluaga y lo dejan sin opciones frente al sistema judicial.
Estas impactantes pruebas fueron entregadas a los fiscales por el exdirector del Instituto Nacional de Vías (Invías) Daniel García Arizabaleta, quien pasó de ser aliado de Zuluaga a convertirse en un testigo clave en su contra, gracias a un principio de oportunidad otorgado por un juez.
García Arizabaleta grabó a Zuluaga durante extensas conversaciones privadas que tuvieron lugar en oficinas en Bogotá y posiblemente en una ocasión en Lima, después de la derrota que sufrieron en la segunda vuelta presidencial frente a Juan Manuel Santos. En los audios, ellos son los únicos participantes. En la actualidad, Zuluaga está a punto de enfrentar cargos por los delitos de falsedad en documento privado, fraude procesal y enriquecimiento ilícito de particulares, lo que podría llevarlo a prisión. Por su parte, su hijo David Zuluaga Martínez, quien se desempeñó como gerente de la campaña, será acusado de fraude procesal.
Los archivos de audio son impactantes y revelan la verdadera naturaleza de Zuluaga, quien durante años negó tener conocimiento sobre la entrada de fondos provenientes de Odebrecht, la multinacional involucrada en casos de sobornos, a su campaña. Estos audios muestran a Zuluaga, quien en 2022 volvió a postularse a la Presidencia, negando una vez más su responsabilidad de manera insistente frente a las cámaras.
Lo primero que se revela en los archivos de audio es que Zuluaga buscó la asesoría de un sacerdote de su confianza para confesar la verdad, admitió su culpabilidad y le solicitó consejo sobre qué acciones debía tomar, ya que se consideraba una persona de gran fe.
“Yo fui y le dije: ‘Padre, dígame una cosa, yo qué debo hacer’. Le conté la verdad de las cosas”. En este punto, García Arizabaleta lo interrumpe y le pregunta con sorpresa: “¿Le contó toda la historia?”, a lo que el excandidato responde que sí.
“Le dije: ‘Padre, yo lo sabía, esto ocurrió así, yo quiero que me diga qué debo hacer, desde la luz, yo soy un hombre de fe, católico’. Me dijo algo sabio y por eso quería que usted hablara con él (refiriéndose a García). Me dijo: ‘Uno tiene que protegerse a sí mismo ante la maldad de los demás. A usted nada lo obliga a no protegerse y proteger a su familia’. Incluso me lo dijo: ‘Eso está en la fe, habla de la restricción mental, usted no tiene por qué inmolarse’”, reveló Zuluaga en la grabación.
Al parecer, el exaspirante comenzó a experimentar una gran angustia por sus acciones y su primera reacción fue buscar alivio al hablar con el sacerdote para obtener una mayor claridad sobre lo que debía hacer. Fue en esa conversación donde encontró orientación. Por esta razón, y considerando que el exdirector del Invías también podría encontrarse en una situación similar, le sugirió que hablara con el padre.
“La semana pasada, cuando sale todo este problema otra vez, que la Fiscalía, que las pruebas, volví y hablé con él y le dije: ‘Padre, ¿yo qué debo hacer?’. Y volvía y me insistía: ‘Usted tiene que protegerse’”, agregó.
García Arizabaleta no se opuso a la recomendación del exaspirante. De hecho, después de que este último mencionara que también había hablado de él con el sacerdote y le había confesado que este asunto era un “secreto de sangre” entre ellos dos y el hijo de Zuluaga, el exdirector del Invías le dice: “Yo quiero ir a hablar con él (sacerdote), pero voy a hablar con él solo”, Zuluaga accede y acuerdan programar la cita.
No se sabe si finalmente García se reunió con el sacerdote, pero en las grabaciones se escucha la gran preocupación de Zuluaga por la posibilidad de que esta situación salga a la luz, especialmente porque su hijo también estaría involucrado. “Es que, Daniel, para mí es papá e hijo, la familia no resiste más esta mierda (…). El desespero es muy grande, la circunstancia para mí es muy difícil (…), esto es un infierno”.
Sin embargo, momentos después de describir la preocupante situación que podría surgir, se escucha al exaspirante intentando tranquilizar a García Arizabaleta, asegurándole que él no se vería afectado por graves consecuencias si se revelara el financiamiento de Odebrecht.
“Ahora lo que queda claro es, y por eso es bueno que usted hable con el abogado, desde ningún punto de vista esto tiene efectos administrativos, sancionatorios o penales, en el caso suyo. A quienes puede afectar es a David, representante legal, y a Óscar Iván, candidato (…). Tendré que asumir toda la responsabilidad si me toca en algún momento, por encima de todos, para proteger a David, para protegerlo a usted y para protegerlos a todos”, aseguró Zuluaga.
Se preocupó por dejar en claro que esa era la esencia de la amistad y la lealtad que él reconocía en sí mismo, ya que asumiría toda la responsabilidad para exonerar de culpabilidad a su hijo y a García Arizabaleta. Sin embargo, de manera curiosa, durante los últimos años ha mantenido una postura de negación absoluta respecto al financiamiento indebido de su campaña en 2014. Incluso lo reafirmó el año pasado, cuando se postuló como precandidato a la Presidencia.
Minutos después de ese momento emotivo, la grabación revela el plan para evitar ser atrapado por las autoridades. En ese momento, cuando ya se estaban presentando denuncias contra la campaña de Zuluaga, él menciona que informó al Consejo Nacional Electoral que no haría comentarios al respecto, pero que realmente quería saber si la Fiscalía contaba con pruebas en el caso y cuáles eran estas.
“Creo que, para protección de todos nosotros, aquí no podemos entregar nada y tenemos que tener una actitud de pelea, incluso los abogados tienen varias cosas que han ido presentándole al Consejo Nacional Electoral (CNE). Por ejemplo, que el tiempo para revisar los topes de campaña ya pasó”, manifestó el excandidato.
Sin embargo, García le advierte que ya había recibido una citación para comparecer ante el CNE, a lo que Zuluaga le respondió que “le iba a sugerir lo que habló con el abogado y es que usted pida un aplazamiento. ¿Cuál sería el caso suyo? Conseguir una cita o algo, con una excusa médica, con el embarazo de Carolina, por lo menos esta semana. (…) Una forma de anticipar, hasta que no conozcamos qué hay, es el silencio. O pedir un aplazamiento con algo de su señora, o que tiene una cita médica, algo que usted lamentablemente no pueda ir”, le dijo a García Arizabaleta.
De esta forma, lo que más deseaba el líder político del Centro Democrático era dilatar el proceso, ganar tiempo para determinar si las autoridades tenían pruebas contundentes en su contra y así saber cómo responder a las citaciones del CNE relacionadas con el caso.