El Centro Democrático emitió este sábado un comunicado en el que acusó a la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) de estar utilizando su poder judicial como una herramienta para atacar a quienes se oponen al proceso de paz, en particular al expresidente Álvaro Uribe Vélez.
Esta acusación surgió a raíz de las recientes declaraciones del magistrado de la JEP, Gustavo Salazar, quien se refirió a la Operación Orión y a las operaciones militares realizadas en la Comuna 13 de Medellín entre 2001 y 2003.
En una entrevista, Salazar afirmó que la denominación “Operación Orión” cubre un periodo de tiempo que va desde 2001 hasta 2003, en el cual se realizaron otras intervenciones militares como Antorcha, Mariscal y Saturno, pero que, debido a la “sonoridad” del nombre de la operación Orión, se optó por utilizar este término para englobar todos estos hechos.
El Centro Democrático interpretó estas declaraciones como una táctica para fortalecer una narrativa política en contra de Uribe, quien fue presidente en ese periodo y, según el partido, sigue siendo objeto de ataques por parte de opositores políticos.
”El argumento de la JEP para elegir el nombre con el que denomina un periodo de tiempo no debería ser la ‘sonoridad’ de una operación militar. Más aún, siendo de público conocimiento que la que denomina el magistrado ‘sonoridad’ de la Operación Orión fue creada y aprovechada por opositores políticos del expresidente Álvaro Uribe”, indicó el comunicado del partido.
El comunicado del Centro Democrático también defendió la Operación Orión, a la que el partido considera clave para la restauración del orden en la Comuna 13 de Medellín.
Según el partido, la operación fue transparente, legal y estuvo alineada con los principios constitucionales. Además, resaltaron que, gracias a esta intervención, la zona, que en ese entonces estaba dominada por grupos guerrilleros y paramilitares, hoy es un centro de arte y turismo.
”La Operación Orión restauró la paz y el orden en la Comuna 13 de Medellín, la cual estaba sometida por milicias urbanas de guerrilla y paramilitares y permitió que hoy sea un centro de arte y de atracción de turismo internacional”, subrayaron.
Además, insistieron en que la operación fue llevada a cabo con el respaldo de diversas instituciones y autoridades, y que, según su visión, fue un acto legítimo en el marco de la lucha contra el crimen organizado.
El partido concluyó que lo expresado por el magistrado Salazar refleja lo que consideran una politización de la justicia, destinada a atacar a quienes se opusieron a los Acuerdos de Paz de La Habana, acuerdos que dieron origen a la JEP.
Según el Centro Democrático, la narrativa que está construyendo la JEP alrededor de la Operación Orión tiene como fin debilitar a sus opositores políticos y, en particular, a Uribe, al asociar esta operación con violaciones a los derechos humanos y con prácticas de guerra sucia.
”Lo expresado por el magistrado Salazar de la JEP, lo que sí hace sonoro, es la que parecería ser la politización de la justicia como instrumento contra quienes nos opusimos a los Acuerdos de La Habana, de los que surgió la JEP”, concluyó el comunicado.
Las declaraciones del Centro Democrático se dan en un contexto más amplio de las investigaciones realizadas por la JEP en la Comuna 13 de Medellín, donde se han encontrado restos de al menos cuatro personas en La Escombrera, una de las zonas más emblemáticas de la violencia que sufrió la ciudad en esos años.
Los hallazgos corresponden a víctimas de desaparición forzada, cuyas muertes están vinculadas a la confrontación entre guerrilla y paramilitares en el periodo comprendido entre 2002 y 2003.
La JEP continúa con los trabajos forenses en el sector, con el objetivo de esclarecer la verdad sobre los desaparecidos y llevar a los responsables ante la justicia.
Los análisis preliminares confirmaron que las víctimas presentaban lesiones causadas por disparos de arma de fuego y signos de violencia provocada durante el proceso de ejecución de los crímenes.
Información de Colprensa.