El Frente Nacional, la Gran Alianza por el Cambio, la Unidad Nacional, son nombres de algunas de las coaliciones políticas que se han formado en Colombia en los últimos 60 años para consolidar la elección de Presidente de la República.

El Frente Nacional, que enterró la dictadura de Gustavo Rojas Pinilla con la sucesión de gobiernos liberales y conservadores; la Gran Alianza, que ideó el conservador Andrés Pastrana para ganar la primera magistratura en 1998, con el apoyo de liberales e independientes; y la Unidad Nacional, la estrategia de mayorías que selló Juan Manuel Santos para ganar sus dos gobiernos (2010 y 2014), son, en parte, el espejo en que pareciera, se quieren mirar quienes en el 2018 esperan suceder al actual jefe del Estado.

Las apuestas políticas están claras. Por ahora, el país elegirá entre dos tendencias: la de centro-derecha, que le apostará a la mano dura en materia de orden público y el proceso de paz; y la otra, que se ubicará en lo que se llama la centro-izquierda, aunque también la extrema-izquierda, con menos fuerza, no se quiere quedar por fuera de la escena política el próximo año.

Independientes e Izquierda

De los independientes y de la izquierda podría salir una nueva coalición que llegaría a ser fuerte, el problema es que a quienes son sus líderes difícilmente se les ve parados en una tribuna apoyando a un mismo candidato para las elecciones presidenciales.

La izquierda tradicional del país, que se representa en el Polo Democrático, ya tiene al senador Jorge Enrique Robledo como su candidato. Cerca de la izquierda, aunque en una tendencia más moderada, está el exalcalde de Bogotá, Gustavo Petro. Y más hacia la derecha de esa izquierda está la saliente ministra de Trabajo, Clara López.

En el centro y con el rótulo de independientes figuran el exgobernador de Antioquia, Sergio Fajardo, y la Alianza Verde, en donde la senadora Claudia López es la principal referente de precandidata.

Robledo, Fajardo y López están en conversaciones desde finales del 2016 para sellar una gran alianza presidencial. Los tres, al ser consultados de cómo avanza esa posibilidad, dicen que siguen en conversaciones y que cada vez encuentran más identidad que diferencias.

El nuevo actor que tendrá la política nacional, la Farc, no es claro cómo se moverá en las justas presidenciales. Hace un par de meses su jefe, Rodrigo Londoño, aseguró que al grupo no le afana la candidatura presidencial sino consolidar su presencia regional, y en eso están con la insistencia de expedición de reformas constitucionales como la que les crea como partido político.

Con las cartas aún sobre la mesa y con un juego en el que falta mucho por abrirse, lo claro es que las alianzas políticas se empezarán a poner de moda a principios del 2018 antes, de la primera vuelta presidencial de mayo.

El centro y el centro-izquierda

La salida esta semana del Gobierno del director de Planeación Nacional, Simón Gaviria, volvió a agitar el abanico de candidatos presidenciales que están en la llamada línea del centro o centro-izquierda, que se inclinan más por la continuidad de los acuerdos de paz que llevaron a las Farc a que se desmovilice, y a tener sentado en una mesa conversando al Ejército de Liberación Nacional (ELN).

Esa continuidad de los acuerdos es en la que ya están comprometidos el Partido de la U (la colectividad del presidente Juan Manuel Santos) y el Partido Liberal. Lo que no tienen claro es si lo hacen con un candidato propio para antes de la primera vuelta, en el marco de una consulta interpartidista, o esperan para la segunda vuelta presidencial.

En el liberalismo por el momento es en donde se podría tener un candidato con mayor opción. Cada vez se hace más factible que el jefe negociador del Gobierno en el proceso con las Farc, Humberto de la Calle, sea el ungido. En la U, los nombres que más se barajan son los del embajador de Colombia en los Estados Unidos, Juan Carlos Pinzón, y el del senador Roy Barreras. La alianza entre estos dos partidos se podría dar en marzo, en la elección de Congreso del partido, cuando se irían a la consulta.

Pero muy cercano a los dos partidos, y al parecer con propuestas que ya se han hecho, está el exvicepresidente Germán Vargas Lleras, quien tiene claro que irá a la primera vuelta sin alianzas, a no ser que logre concretar que el liberalismo o la U lo acompañen.

Al principio de este año se hizo público un supuesto ofrecimiento de Vargas al saliente director de Planeación Nacional para que fuera su candidato a la Vicepresidencia de la República. Simón Gaviria dimitió precisamente dos semanas antes de inhabilitarse para aspirar a ocupar la Casa de Nariño desde el 2018.

Por el lado de la U, igualmente, se ha dicho que al presidente Santos le gustaría que el embajador Pinzón fuera su candidato, en una fórmula propia, que no se vería que tome fuerza, o en una fórmula compartida y precisamente sería con Vargas Lleras.

Es decir, el jefe de Cambio Radical podría estar ‘incubando’ la nueva etapa de la Unidad Nacional, la coalición que podría consolidar ese binomio en la segunda vuelta, momento electoral en que casi todos los sectores políticos coinciden se dará el próximo año.

Conservadores y uribistas

El ajedrez electoral, a un año de la primera vuelta presidencial, que será el 27 de mayo, muestra que estarán en la centro derecha el Partido Conservador y el Centro Democrático.

Esta semana que termina, en el marco de un foro de partidos de centro-derecha, el presidente del conservatismo, Hernán Andrade, y la excandidata de esa colectividad, Marta Lucía Ramírez —quienes son fuertes contradictores—, coincidieron en que la colectividad le apostará a tener candidato propio.

Si los conservadores se la juegan por esa posibilidad (lo que deberán ratificar en una convención después de septiembre) en la primera vuelta, solo buscarían una alianza para la segunda. Su más claro socio volvería a ser el expresidente Álvaro Uribe, tal y como lo hicieron en el 2014, cuando Ramírez, luego de sacar un poco más de dos millones de votos, adhirió a Óscar Iván Zuluaga, el candidato del uribismo que pasó a la segunda vuelta.

En el Centro Democrático, en donde hay un debate sobre si es o no un partido de derecha, su candidato saldrá entre María del Rosario Guerra, Iván Duque, Carlos Holmes Trujillo, Paloma Valencia y Rafael Nieto Loaiza.

A esa baraja podría llegar Luis Alfredo Ramos. Sin embargo, el expresidente Uribe, en la convención de hace una semana, reiteró que buscará que los sectores conservadores del expresidente Andrés Pastrana y el exprocurador Alejandro Ordóñez lleguen allí para la primera vuelta de mayo del 2018.


Ordóñez hasta ahora no ha querido decir cuál será su decisión política. De aspirar como candidato presidencial independiente se iría por firmas, de haber una consulta interpartidista se presentaría a la misma, y también en condición de independiente y no como conservador.

El Centro Democrático, las iglesias cristianas, el expresidente Andrés Pastrana y el exprocurador Alejandro Ordóñez, vieron frutos de la alianza en el triunfo del Plebiscito por la Paz de octubre pasado.