La espada de Bolívar se convirtió en un símbolo protagonista en la posesión presidencial, luego de que el nuevo presidente de la República, Gustavo Petro, ordenara a la Casa Militar llevarla a la ceremonia. Cerca de 20 minutos después de que el nuevo mandatario de los colombianos hiciera esta solicitud, la espada de Bolívar apareció fuertemente custodiada. Además, desde el Gobierno Nacional destacaron que después de “rendirle honores”, la espada regresará al lugar donde reposa en la Casa de Nariño.
La presencia de este símbolo en el acto de transmisión de mando generó una fuerte polémica, después de que el mandatario saliente Iván Duque no permitiera su traslado. Sin embargo, Petro mantuvo su deseo de ver la espada de Bolívar en su posesión y antes de tomar juramento a la nueva vicepresidenta, Francia Márquez, pidió su traslado a la Plaza de Bolívar. Lea además: Los mensajes de despedida de algunos de los ministros del gobierno saliente de Iván Duque Una vez la espada llegó a la Plaza, el nuevo Presidente recalcó la importancia de que estuviera allí, a pesar de que Duque se opuso. “Llegar aquí junto a esta espada para mí es toda una vida, una existencia. Esta espada representa demasiado para nosotros y quiero que nunca más esté enterrada, retenida. Que solo se envaine, como dijo su propietario el libertador, cuando haya justicia en este país. Que sea la espada del pueblo”, dijo Petro. “Quizá para los próximos años para los presidentes y presidentas se vuelva un hecho protocolario, simbólico, que los acompañe siempre la espada libertaria de Bolívar”, aseguró también el mandatario.