El ministro de Trabajo, Antonio Sanguino, anunció que el Gobierno Nacional expedirá ocho decretos reglamentarios para aplicar ciertos puntos de la reforma laboral, a pesar de que esta fue archivada en la Comisión Séptima del Senado.
La decisión surge luego del fuerte rechazo que recibió la propuesta en el Congreso, lo que generó molestia en el jefe de la cartera laboral. Sanguino cuestionó duramente los argumentos presentados en contra de la reforma, calificándolos de engañosos y sin fundamento.
“Hemos demostrado lo falaz de sus argumentos. El argumento de inconstitucionalidad es absolutamente mentiroso, es traído de los cabellos. Los argumentos sobre impacto fiscal, los argumentos sobre inconveniencia, los argumentos sobre impacto en el empleo fueron demostrados en este debate que son absolutamente falaces”, afirmó el ministro ante los medios.
Durante su intervención, Sanguino expresó su inconformidad con la forma en que se manejó el debate en el Senado, asegurando que existió una intención clara de frenar la reforma sin una verdadera discusión.
“Nosotros hemos demostrado en este debate que hay mentiras, que son absolutamente falaces los argumentos que han esgrimido, que se mantuvieron desde el inicio en su capricho de hundir la reforma laboral. No modificaron ni una sola de sus posiciones, que le demostramos que lo que pasó en Cámara fue un proceso de concertación, de discusión amplia, y ellos se negaron a que esa concertación siguiera”, señaló.
Los decretos que serán emitidos por el Gobierno Nacional pretender abordar aspectos clave de la reforma que no lograron ser aprobados en el Legislativo, aunque hasta el momento no se han especificado cuáles serán las medidas concretas ni su alcance.
El debate sobre la reforma laboral sigue generando tensiones entre el Ejecutivo y el Congreso. Mientras el Gobierno insiste en la necesidad de garantizar mayores derechos para los trabajadores, la oposición sostiene que la propuesta representaba “riesgos económicos y fiscales para el país”.
Con la expedición de estos decretos, el Gobierno busca avanzar en la implementación de algunos de los cambios propuestos sin necesidad de pasar nuevamente por el Congreso. Se espera que en la próxima legislatura se radique un nuevo proyecto de reforma laboral, según lo anticipado por algunos senadores en el debate de este 18 de marzo en el Senado.
Otros congresistas expresan que es hora de que Colombia le apueste a un estatuto del trabajo, pues esta es una orden incumplida que se consagra en el artículo 53 de la Constitución. Una deuda con los trabajadores del país que acumula más de 30 años desde la constituyente.