Luego de cuatro horas de una nueva sesión de la audiencia preparatoria del juicio contra Álvaro Uribe por presunto soborno de testigos y fraude procesal, la jueza 41 de Conocimiento de Bogotá suspendió la diligencia, en medio de la intervención del defensor del expresidente, Jaime Granados, quien presentaba la postulación 32 de 160 pruebas que espera exponer.

La audiencia se retomará el próximo jueves 31 de octubre, cuando se espera que el abogado termine su intervención, en la que aseguró que el mismo Uribe podría declarar en el juicio, con el objetivo de desmentir las acusaciones formuladas por la Fiscalía General de la Nación durante el proceso.

El abogado Jaime Granados tuvo el uso de la palabra durante la audiencia de este viernes. | Foto: COLPRENSA ©

Como es conocido, el caso tiene como punto central las declaraciones de testigos como Juan Guillermo Monsalve, quien vinculó al exmandatario en los hechos que se investigan.

De otro lado, al principio de la audiencia, mientras Granados realizaba la enunciación de los testigos que espera que sean tenidos en cuenta para el juicio, el abogado Miguel Ángel del Río lo interrumpió, situación que motivó a que el abogado le pidiera respeto y la jueza interviniera.

El objetivo es sabotear la intervención de este defensor y su solicitud probatoria”, rechazó Granados y añadió: “Ya bastante difícil ha sido que tengamos que presentar nuestra defensa y ahora no permite que le demos continuidad, con estas interrupciones que son impertinentes”.

Del Río continuó solicitando la palabra, colmando la paciencia del defensor de Uribe, quien pidió la intervención de la jueza, al considerar que esto era una afectación al debido desarrollo de la audiencia: “Su señoría, otra vez”, reclamó.

En ese momento, la jueza prendió su micrófono e indicó: “Doctor Miguel Ángel, no vamos a hacer intervenciones impertinentes. No vamos a distraer el origen de esta diligencia y la palabra la tiene el doctor Granados y lo vamos a respetar”.

El llamado de atención fue ignorado por del Río, obligando a que la togada amenazara tomar “la penosa posibilidad” de cerrarle el micrófono.

El expresidente Álvaro Uribe fue enfático al advertir que no le estaban permitiendo el derecho a defenderse de forma adecuada. El Tribunal Superior de Bogotá le dio la razón.

Así es muy difícil ejercer el derecho a la defensa, por las constantes interrupciones del abogado Miguel Ángel del Río. Con todo respeto, le solicito que le bloquee el micrófono, porque me está interrumpiendo al hacer la solicitud probatoria”, dijo Granados.