En lo que pretendía ser una estrategia para hacer impedir a los senadores para que no pudieran votar el próximo miércoles en la elección del nuevo procurador general de la Nación, la plenaria de la corporación ya negó las que se tramitaron contra cinco de ellos.
En tal sentido en la última sesión de esta semana, el miércoles 25, la plenaria negó con 58 y 6 por el Sí, las recusaciones que se habían impuesto contra los senadores miembros de la Comisión de Acreditación, José Vicente Carreño, Alejandro Chacón, Juan Samy Merheg, Isabel Cristina Zuleta y Andrea Padilla, integrantes de la Comisión de Acreditación del Congreso.
Al no ser aceptadas, los cinco senadores podrán desempeñar sus funciones para la revisión de los requisitos de cada uno de los ternados para la Procuraduría.
Las recusaciones de los cinco senadores, como las que podrán llegar, son enviadas a la Comisión de Ética para que la misma resuelva si las acepta o no, su respuesta se dará antes del miércoles.
En la recusación se argumenta que tanto Chacón como Merheg no puede examinar el cumplimiento de los requisitos de los candidatos a la Procuraduría, porque los partidos Liberal y Conservador manifestaron de manera anticipada que votarán por Gregorio Eljach para que sea elegido como jefe del Ministerio Público, lo cual les generaría un conflicto de interés.
Sin embargo, Chacón, Merheg, como los otros miembros de la Comisión de Acreditación, argumentaron que pedían les aprobaran el impedimento se debía a que participaron abiertamente hace dos años en la votación para elegir a Eljach como secretario general del Senado, tesis que fue desestimada.
La plenaria con lo dispuesto señala que se trata de una función constitucional que deben cumplir sin perjuicio de las decisiones que en el pasado hayan tomado en favor o en contra de alguno de los ternados.