Un nuevo escándalo rodea la política nacional. Esta vez, el presidente Gustavo Petro fue quien hizo fuertes denuncias acerca de negocios que habrían sido completados en el Gobierno anterior, los cuales envolverían temas de defensa y seguridad nacional.
Según la información recogida, el ministerio de Defensa anterior concretó la compra de aeronaves europeas que eran propiedad de una compañía italiana envuelta en corrupción. De hecho, lo que ahora argumenta el mandatario es que también habría irregularidades entre los altos funcionarios que participaron de la transacción y los empresarios europeos.
Frente a esto, Marta Lucía Ramírez, vicepresidenta y canciller durante el gobierno de Duque, afirmó que: “En mi Calidad de Vicepresidnete y Canciller durante la administración anterior, no tuve ninguna competencia o responsabilidad frente a adquisición de aviones ni equipos militares. No estuve involucrada, ni participé en reuniones o encuentros con empresas del sector de seguridad y defensa”.
Asimismo resaltó que: “Lo relacionado con el Ministerio de Defensa y la interlocución con empresas del sector siempre se manejó por el conducto regular: el Ministerio de Defensa Nacional y las compras de esa entidad deben explicarlas quienes estuvieron en esa cartera”.
Por otro lado, el comunicado afirmó que el exministro de Defensa del Gobierno de Presidente Duque desmintió que haya habido negociación, ni contrato de compra de aviones de combate con empresas italianas.
Asimismo, “en publicación de ayer en medio de prensa italiano menciona las investigaciones en ese país en contra de el ex primer ministro, presidente del partido comunista italiano Massimo D’Alema, quien habría mencionado el interés de contactarme para presentar una pretendida venta de aviones italianos a Colombia. Si hubo esa intención de parte del señor D’Alema, ese interés se frustó y jamás me reuní con él, ni lo conozco a él ni a sus aliados en el escándolo que por fortuna investiga la justicia italiana”, resaltó Ramírez.
Frente a esto, la exvicepresidenta reflexionó: “No tiene por qué haber investigación formal en mi contra, ni requerimiento de la justicia como han intentado desinformar”.
Por otro lado, cualquier acusación de corrupción que tenga pruebas o indicios suficientes debe investigarse en cualquier tiempo y la justicia debe proceder, independientemente del cargo que ocupe la persona quien aparezca evidencias de su vinculo a un delito. Así lo confirmó Ramírez.
“Al más propio estilo que el país ya conoce de los detractores políticos que llegaron al poder, he sufrido toda suerte de acusaciones y descalificaciones infundadas que han aplicado de manera brutal contra todo y contra todos los que obstaculizan sus intereses. Los colombianos pueden tener la certeza de que jamás encontraran en mi larga vida pública o privada ningún hecho o acción oscura ni ilegal”.
Por ello, “no es momento de tragar entero frente al ejercicio tuitero de altas responsabilidades de Estado con las cuáles se ataca a gobiernos amigos, mientras se ensalza en actitud condescendientes a los enemigos de Colombia”.
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Frente a las publicaciones en la prensa, Ramírez anotó que: “Antes de cometer el abuso de usar mi nombre para titular un escándolo de compra de aviones a Italia, habría sido deseable que una prensa seria y responsable hubiera indagado, pues era muy fácil establecer que nuestro gobierno, a diferencia del actual, jamás cerró negociaciones de compra de aviones de combate ni yo tuve ninguna reunión para este propósito”.
Asimismo, Ramírez afirmó que el actual gobierno financia a quienes vandalizaron el país, se descalifica a funcionarios e instituciones que no se subordinan a amenazas y se desconoce la autonomía y legitimidad institucional.
“Nos corresponde a todos en este momento oscuro de historia, cuidar la institucionalidad. Durante décadas no se cuestionaba de tal manera la legitimidad de un Gobierno y es infructuoso que desde el ejecutivo intentan crear Otra Cortina de humo para soslayar sus responsabilidades”, finalizó.