A pesar de las marcadas diferencias que ha tenido con la Rama Judicial, el presidente Gustavo Petro aseguró este lunes que respetará la separación de poderes. Durante la posesión del magistrado de la Corte Suprema de Justicia, Carlos Roberto Solórzano, el mandatario dijo que no ejercerá ningún tipo de presión sobre las sentencias de las altas cortes.
“Para mí la defensa de la autonomía del Poder Judicial es fundamental. De parte del Gobierno Nacional tengan ustedes la garantía de su independencia, de la ayuda que podamos proferir por los caminos que toque, para que la justicia cada vez sea más poderosa en Colombia”, manifestó Petro.
De hecho, su discurso fue más allá y enfatizó en que “sin justicia no hay paz”. Petro también fue enfático en que el objetivo de su Gobierno es que “las gentes tengan justicia en el sentido amplio y en el sentido estricto de la palabra”.
El mensaje de Petro se da tres días después del urgente llamado que hizo el presidente de la Corte Suprema de Justicia, el magistrado Fernando Castillo, quien pidió respeto a la soberanía judicial y advirtió que esta no puede ser sustituida por tribunales internacionales.
“Hemos insistido sobre la clara inviabilidad de traer comisiones internacionales que intentan sustituir el funcionamiento constitucional de la Rama Judicial en cualquiera de sus vertientes. La semana pasada el señor Fiscal de la Corte Penal Internacional, Karim Khan, le reafirmó a todo el país que Colombia no es un Estado fallido y que se encuentra en capacidad de garantizar que no haya impunidad”, dijo Castillo durante la convención de Asobancaria.
A finales de mayo, también el Consejo de Estado pidió al presidente Petro respetar la autonomía judicial, luego de que cuestionara decisiones que afectaban a miembros del Pacto Histórico. “Están cambiando de facto la representación política en el Congreso que el pueblo eligió. Le quitaron al Pacto la presidencia del Congreso y ahora sus votos. Es el golpe blando”, trinó el Mandatario en ese momento.
El Consejo de Estado, por su parte, argumentó que sus decisiones se basan en la jurisprudencia y la ley, alejadas de las controversias políticas e ideológicas. “Ajeno a controversias políticas e ideológicas, el actuar de este tribunal se basa en la defensa de la juridicidad y en principios como el de la colaboración armónica entre las ramas del poder público”, advirtió.
El fiscal general de la Nación, Francisco Barbosa, tampoco ha sido ajeno a los ‘encontrones’ con Petro por diferentes razones, desde órdenes de captura contra narcotraficantes y la liberación de miembros de la llamada primera línea, hasta el más reciente escándalo de las ‘chuzadas’ que involucran a exjefe de gabinete, Laura Sarabia y el exembajador de Colombia en Venezuela, Armando Benedetti.
En mayo, la pelea entre ambos se agudizó después de que Petro se autodenominara jefe de Barbosa. Este último no guardó silencio y llegó a tildar a Petro de dictador. De hecho, en la reunión que el Presidente sostuvo con las altas cortes el mes pasado, los magistrados emitieron un mensaje en el que ratificaron la separación que debe existir entre el poder ejecutivo y el judicial, a raíz de la tensa relación entre el Mandatario y el Fiscal.
Al finalizar, el encuentro los magistrados emitieron un mensaje, en el que ratificaron la separación de poderes Judicial y Ejecutivo. “Como representantes de las jurisdicciones ordinaria, contencioso, administrativo constitucional y del órgano de gobierno y administración de la Rama Judicial, coincidimos con el señor presidente de la República en la necesidad de mantener en firme compromiso de encauzar las diferencias a través de los mecanismos institucionales dentro del respeto irrestricto a la autonomía e independencia judicial”, decía el comunicado.