En la Casa de Nariño, el presidente de la República, Gustavo Petro, se reunió con la general Laura J. Richardson, comandante del Comando Sur de los Estados Unidos, en donde dialogaron sobre temas de interés militar de ambos países y diferentes propuestas.
Aunque el encuentro se desarrolló de forma privada, durante la posesión del embajador de Colombia en Estados Unidos, Luis Gilberto Murillo, el presidente Petro dio a conocer que propuso la creación de una Fuerza Militar que se encargue de proteger la selva amazónica.
“Le proponía a la general la construcción de una fuerza, que ya me dijo ella tenía un esbozo en Brasil, una Fuerza Militar con helicópteros, etcétera, pero destinada a apagar los fuegos de la selva amazónica, que es el principal problema de seguridad de la humanidad hoy”, afirmó Petro durante el evento.
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Y el mandatario reiteró: “No del narcotraficante tal o pascual, sino que es la gente que está quemando la selva, porque si se quema la selva hay punto de no retorno. Punto de no retorno es que no hay salvación, ya no se puede hacer nada. Punto de no retorno en la extinción de la especie humana, en la crisis climática”.
El presidente aseguró que es importante que la humanidad se enfoque en cuidar la selva amazónica y reiteró que es uno de los temas en los cuales tiene mayor prioridad y en el que debería estar trabajando el mundo.
“Nuestro rival está en esas llamas que pueden quemar la selva. Y el mejor mensaje que una colaboración militar entre Estados Unidos y Colombia y podría hacer al mundo es precisamente que no se queme, y que establecemos los mecanismos económicos y sociales, por un lado, y los mecanismos militares y operativos, por el otro lado, para impedir la quema de la selva amazónica”, afirmó Petro.
Entre otros temas, el presidente aseguró que le manifestó a la general que la actual política antidrogas no ha sido exitosa.
“Hablábamos ahora en extenso con la general del fracaso de la política antidrogas. Yo creo que hay que llamarlo así, sin miedo, la política que se llamó guerra contra las drogas en tiempos de Richard Nixon para acá, ha fracasado”, afirmó Petro.
Y explicó: “Es nuestro deber, ante los mismos Estados Unidos, pero también ante el mundo, no solo decirlo, sino proponer alternativas que no sean las de tener un millón de latinoamericanos más muertos, centenares de miles presos, millones de norteamericanos muertos por sobredosis, destrucción democrática y violencia por doquier”.