Reiterando la importancia de la ley, en el Salón Gobelinos de la Casa de Nariño, el presidente Gustavo Petro sancionó la reforma tributaria que finalmente se hizo ley después de haberse conciliado en el Congreso de la República.
El mandatario colombiano recordó que los recursos que se recojan de esta, que serán de cerca de 20 billones de pesos anuales, serán destinados a programas sociales y en atender a la población más vulnerable.
“Siempre giraban alrededor de los mismos ejes que básicamente consistían en extender el IVA a la canasta básica familiar originando lo que ya las estadísticas muestran y es que las reformas tributarias nunca en la época contemporánea mejoraron las circunstancias de desigualdad social de la sociedad colombiana”, explicó el mandatario colombiano.
El presidente Petro además manifestó que la reforma estuvo rodeada de diferentes argumentos que quisieron deslegitimarla en medio de su aprobación, entre esos estuvo relacionada la caída del peso colombiano con el alza del dólar.
“Se anunciaba que respecto a la presente iba a generar una caída del peso colombiano, esa primera crítica no funcionó, hoy tenemos una tasa de cambio en $4.760 y pico, realmente casi la misma con la que recibimos el Gobierno. Se puede concluir que la aprobación de la reforma tributaria no trajo una caída del peso”, manifestó Petro en su discurso.
El presidente además reiteró que la reforma y su adición presupuestal se enfocará en cumplir objetivos como el fortalecimiento de la educación, para la reforma agraria, la justicia ambiental, la transición energética y una mayor adecuación y mejora de las finanzas públicas.
“En la presentación del proyecto de adición presupuestal, que es en qué se va a gastar la reforma tributaria, y que pretendo se presente en febrero en el Congreso de la República, pues mostrará los objetivos mismos que nos propusimos al pedirle parte de la sociedad colombiana un esfuerzo tributario”, afirmó el presidente Petro.
El mandatario colombiano aseguró que la importancia de la reforma es que genera productividad y esto se logrará desde la generación de empleo que permitirá que la sociedad sea más próspera. También aseguró que en medio de la aprobación se tuvo que ceder a ciertos temas en los que a él le hubiera gustado avanzar, particularmente en el impuesto a las altas pensiones.
“Muy alejado de los intereses generales de la población que es lo que ordene la Constitución, le ley tiene que obedecer es al interés general, no al particular si se trata de los sectores más poderosos del país (…) quizás no tanto como hubiéramos querido nosotros, siempre aquí hay puntos medios, temas que no se logran, a mi si me hubiera gustado el impuesto alto a las altas pensiones, siempre quedará la duda de si lo hubiéramos logrado o no, es parte de los temas de la evaluación, pero logramos lo principal”, afirmó el presidente.
Finalmente, el presidente aseguró que con los diferentes impuestos que trae la reforma se busca que estos disminuyan mayor su consumo y no que el Gobierno recaude más dinero, esto particularmente refiriéndose al impuesto de bebidas azucaradas y de otros alimentos.