Senadora cinco veces, amiga de Hugo Chávez, gestora de la liberación de secuestrados e investigada hasta su muerte por ser la supuesta aliada en las sombras de las Farc, Piedad Córdoba no huyó nunca de la confrontación política.
La congresista, que falleció este sábado 20 de enero, inició su trayectoria como líder comunal en los barrios de Medellín. Esto le ayudó a obtener su primer puesto en la política al llegar a la Cámara de Representantes en 1992. También fue senadora en cinco oportunidades a bordo del partido Liberal Colombiano y más reciente del Pacto Histórico.
A pesar de su clara oposición contra el expresidente Álvaro Uribe Vélez, Piedad Córdoba fue nombrada en 2007 como facilitadora para el acuerdo humanitario entre la guerrilla de las Farc y el Gobierno colombiano de aquel entonces para la búsqueda de la liberación de personas secuestradas.
Aunque aquí empezaron los rifirrafes entre el expresidente Hugo Chávez y Uribe por la poca ayuda en este proceso, sí se dio una cercanía entre Córdoba y el gobierno venezolano. Este nombramiento también fue uno de los puntos oscuros de la carrera política de Córdoba, ya que se conocieron fotos de la senadora junto a los representantes de las Farc Iván Márquez, Rodrigo Granda y Jesús Santrich en donde se realizaban reuniones en el palacio de Miraflores, sede del gobierno venezolano.
Los hallazgos en los computadores tras el bombardeo a ‘Raúl Reyes’, donde se encontró información sobre la existencia de ‘Teodora Bolívar’, que sería el alias que habría utilizado Córdoba probarían su contacto y cercanía con la organización criminal.
A hoy, el proceso denominado “FarcPolitica” sigue abierto en la Corte Suprema de Justicia y se esperaba que Córdoba fuera llamada a indagación. En el alto tribunal también enfrentaba otro proceso por su presunta responsabilidad en los delitos de peculado por apropiación y enriquecimiento.
En su proceso ha declarado su exasesor Andrés Vásquez, quien indicó que Córdoba se habría puesto de acuerdo con el secretariado de las Farc para obtener el mayor beneficio político posible con la liberación de los secuestrados, tanto para ella como para el entonces presidente de Venezuela, Hugo Chávez.
Córdoba, según las declaraciones, también habría asesorado a las Farc, sobre cuál era la mejor forma para entregar las pruebas de supervivencia y para realizar la liberación de los secuestrados, para que fuera bien interpretada por la opinión pública.
También mencionó que la exsenadora se habría molestado mucho con la ‘Operación Jaque’, que permitió la liberación de Ingrid Betancourt y los tres contratistas estadounidenses, entre otros secuestrados, porque le quitó la oportunidad de aprovechar políticamente el hecho.
El último hecho polémico en el cual se vio a la senadora fue la reciente captura y extradición de su hermano Álvaro Córdoba, acusado por una corte del distrito de Nueva York por los delitos de narcotráfico, porte ilegal de armas y concierto para delinquir.
*Con información de Colprensa.