Pese a todos los esfuerzos que ha hecho el gobierno del presidente Gustavo Petro para salvar el proyecto de ley de la reforma a la salud y tras la petición de este martes para una nueva ponencia a la Comisión VII del Senado por parte del ministro del Interior, Luis Fernando Velasco, el Ejecutivo ha sufrido una nueva derrota.
Asimismo, en la sesión de hoy lograron aplazar el debate para mañana miércoles a partir de las 8:00 de la mañana algo que la senadora y presidenta de la Comisión, Martha Peralta, del Pacto Histórico, intentó evitar hace mes y medio, cuando se reanudó la legislatura en el presente año, para así darle tiempo al Gobierno Nacional de consolidar unas mayorías de congresistas.
Por lo tanto, estos sucesos siguen confirmando el virtual hundimiento de la reforma a la salud luego de que ocho senadores como Miguel Ángel Pinto, Berenice Bedoya, Nadia Blel, Lorena Ríos, Alirio Barrera, Honorio Henríquez, Norma Hurtado y José Alfredo Marín el pasado 12 de marzo firmaran una ponencia de archivo. Además, la congresista Ana Paola Agudelo, del partido Mira, manifestó públicamente su intención de votar a favor del archivo.
La jornada de este martes
En medio de una encrucijada, la senadora Peralta llamó a sesión informal, con el fin de que los parlamentarios que integran la célula lograran conversar sobre el orden.
El ministro de Salud, Guillermo Alfonso Jaramillo, hizo presencia junto a Félix León Martínez, director de la Adres, pero ningún senador opositor al proyecto de ley decidió quedarse en el recinto.
Mientras que los senadores afines al Gobierno Nacional se quedaron en la sala, los ocho que firmaron la proposición se fueron a la oficina de la vicepresidenta Lorena Ríos para discutir el futuro del proyecto.
Según la revista SEMANA, la conclusión que llegaron los senadores durante dicha reunión es que se mantienen firmes con hundir la reforma a la salud. Sin embargo, el Gobierno Petro insiste en poder dilatar el inicio de la discusión, dado que el primer punto de esta es la ponencia de archivo, que cuenta con mayorías para tener éxito.
Ante la imposibilidad de concertar al Ejecutivo todavía le queda un milagro que sería en la Comisión de Ética y podría resolver las recusaciones contra los senadores de la VII. Pero esa Comisión también está recusada, aunque varios sectores han advertido por una posible jugada a la hora de votar los impedimentos, ya que están agrupados por bloques divididos entre cercanos al Gobierno y opositores.
El miércoles se podría hundir la reforma. Pero en caso de que se llegue a dar un milagro, la Comisión de Ética la será la encargada de decidir el futuro de la iniciativa del Gobierno Petro.