La reforma laboral impulsada por el Gobierno Nacional y que fue liderada por la ministra de Trabajo, Gloría Ramírez, fue oficialmente radicada en la noche de este jueves ante el Congreso de la República.
El proyecto llega al Legislativo sin grandes cambios, pese a la discusión que por tres días se le dio en la Comisión Permanente de Políticas Laborales y Salariales entre gremios, sindicatos y representantes del gabinete presidencial.
De acuerdo con el Gobierno, el proyecto pretende modificar el Código Sustantivo de Trabajo y en especial tres aspectos relacionados con la igualdad de oportunidades para los trabajadores, la protección de los derechos individuales y la protección del derecho colectivo con relación a las garantías sindicales.
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El proyecto también prioriza la contratación a término indefinido, tratando de reducir al mínimo la tercerización laboral, establecen límites a la contratación por prestación de servicios, prohibiendo de tajo la celebración de contratos de prestación de servicios o cualquier tipo de contrato civil o mercantil con personas naturales para realizar actividades permanentes y subordinadas.
Además, la reforma plantea que el pago de las horas extras vuelva a cancelarse a partir de las 6:00 de la tarde y no desde las 9:00 de la noche, como opera actualmente. Ligado a este punto, se plantea que los recargos, es decir, los pagos relacionados a los días dominicales y festivos, pase del 75%, como se hace actualmente, a un 100% sobre el salario ordinario en proporción a las horas laboradas, sin que se afecte el salario ordinario a que tengan derecho el trabajador por haber laborado la semana completa.