El presiente de la República, Gustavo Petro, y el presidente de la Corte Suprema de Justicia, el magistrado Gerson Chaverra Castro, se reunieron por más de dos horas en la noche de este martes, 6 de febrero. El encuentro se dio en medio de las recientes tensiones por la supuesta ruptura institucional denunciada por el mandatario.
La reunión se dio entre las 6:00 de la tarde y las 8:00 de la noche de este martes y también participaron el vicepresidente del alto tribunal, Octavio Augusto Tejeiro, y el director del Dapre, Carlos Ramón González. Según señalaron fuentes de la Corte, “dialogaron sobre los procesos institucionales en curso y la necesidad de respetar los tiempos, procedimientos y funciones”.
Desde la Corte Suprema de Justicia indicaron también que en la reunión se abordó “la urgencia de promover el respeto entre todas las instituciones y sectores del país, en el propósito de salvaguardar la solidez de la democracia colombiana”.
Cabe decir que el ‘cara a cara’ tuvo lugar dos días antes de la nueva cita en la alta corte para la elección de la fiscal, entre las ternadas por Petro. Hace solo unos días, el presidente Petro urgió a que la Corte elija rápidamente al sucesor de Francisco Barbosa, que saldrá de la entidad el próximo 13 de febrero.
Aunque el presidente Petro negó que exista algún tipo de presión en contra de las cortes, a través de su cuenta de X, nuevamente convocó a movilizaciones. “Un gobierno progresista no atacará la justicia, pero sí a la impunidad. El progresismo es básicamente justicia, ciencia y poder popular. Por eso la situación actual no debe dirigirse como una presión a las cortes”, aseguró.
Y añadió que desde la Presidencia de la República han solicitado “organizar las coordinadoras de fuerzas populares en cada municipio y departamento. Todo intento de golpe o violencia será respondido por la movilización popular general”.
¿Por qué Petro convocó a movilizaciones?
El pasado fin de semana, cuando estaba el fragor de su denuncia sobre el supuesto rompimiento institucional, Petro convocó a sus seguidores a salir a las calles a defender la democracia y en particular que su elección fue legal.
Petro defendió el aporte de 500 millones de pesos que fue girado a la coalición política que le llevó a ser presidente –el Pacto Histórico– por uno de los sindicatos más poderosos que tiene el país: los maestros agremiados en Fecode.
De inmediato, esa organización informó que el jueves 8 de febrero los diez millones de estudiantes de colegios públicos no irán a clase porque sus maestros saldrán a las calles a marchar en defensa del gobierno de Gustavo Petro.
En el caso de Bogotá, esperan llegar hasta el Palacio de Justicia para exigir a la Corte Suprema de Justicia que escoja de inmediato a la nueva fiscal general de la Nación, la cual reemplazará a Francisco Barbosa, a quien Petro le señaló de estar detrás de un golpe de Estado que se está gestando en su contra.
La marcha de Fecode rápidamente empezó a tener apoyo de todas las organizaciones sindicales del país, que también respaldarían el rechazo al supuesto rompimiento institucional del cual habla el Jefe de Estado.