El ácido úrico es un compuesto que se produce a partir de las purinas presentes en ciertos alimentos, y su acumulación en el organismo puede causar problemas de salud, como la gota y otras afecciones inflamatorias.

Para mantener niveles saludables de ácido úrico, es importante seguir una dieta equilibrada y evitar el consumo excesivo de alimentos ricos en purinas. A continuación, algunos alimentos que pueden ayudar a reducir los niveles de ácido úrico y promover una dieta más saludable:

Los especialistas recomiendan mantener una dieta que incluya frutas y verduras. | Foto: Getty Images

Uno de los alimentos destacados en la lucha contra el ácido úrico es la alcachofa. Esta verdura es conocida por sus propiedades diuréticas, que ayudan a eliminar toxinas y líquidos del organismo, contribuyendo así a reducir los niveles de ácido úrico. Además, la alcachofa es rica en minerales, vitaminas y antioxidantes, lo que la convierte en un alimento beneficioso para la salud en general.

Se puede disfrutar hirviendo las alcachofas y consumiéndolas con un poco de aceite de oliva y vinagre de manzana.

Otro aliado en la lucha contra el ácido úrico es la cebolla. Este vegetal no solo ayuda a reducir los niveles de ácido úrico en la sangre, sino que también puede ayudar a disminuir los triglicéridos. Una forma de preparación es cocer un par de cebollas, cortarlas en trozos y mezclar el agua de cocción con el jugo de medio limón, obteniendo una bebida beneficiosa para consumir durante el día.

La calabaza es otra verdura recomendada para reducir el ácido úrico. Gracias a su propiedad diurética, ayuda a eliminar las sustancias nocivas del cuerpo a través de la orina. Puede cocinarla al horno o hervirla, y también aprovechar las semillas de calabaza, que son muy saludables.

Además, la calabaza es rica en vitamina C, un nutriente esencial para fortalecer el sistema inmunológico.

La alcachofa es rica en agua, fibras y flavonoides. Foto: Getty Images. | Foto: Foto: Getty Images.

El apio, por su parte, es conocido por su efecto depurador y puede ayudar a eliminar el ácido úrico de forma natural. Su capacidad para limpiar la sangre y eliminar toxinas lo convierte en un aliado para la pérdida de peso y la salud en general. Puede hervir el apio en agua y consumirlo como infusión para aprovechar sus beneficios.

Las zanahorias también son una opción valiosa para aquellos que buscan reducir los niveles de ácido úrico. Estas verduras son sabrosas y saludables, y su consumo puede ayudar a eliminar el exceso de purinas y cristales que se acumulan en las articulaciones. Una opción deliciosa es preparar un jugo natural mezclando zanahorias con remolacha, que proporcionará un impulso adicional a la dieta.

Asimismo, es esencial limitar el consumo de alimentos que contienen altos niveles de purinas para mantener el ácido úrico bajo control. Carnes de caza, vísceras, embutidos, cerveza, anchoas, sardinas y mariscos son algunos ejemplos de alimentos que deben ser consumidos con moderación. Un estudio publicado en The American Journal of Medicine respalda esta recomendación.

Es importante recordar que, además de seguir una dieta adecuada, el ejercicio también desempeña un papel fundamental en el bienestar general. Mantenerse activo y realizar actividad física de manera regular puede mejorar el funcionamiento del cuerpo y ayudar a controlar los niveles de ácido úrico.

Está comprobado que los alimentos con altas concentraciones de purinas elevan el ácido úrico, generando dolores en las articulaciones, artritis, gota, entre otras enfermedades. | Foto: Getty Images

Además de incluir los alimentos mencionados anteriormente, también es beneficioso agregar frutas ricas en vitamina C a la dieta. Las cerezas, los cítricos y los arándanos son ejemplos de frutas que pueden ayudar a reducir el ácido úrico debido a su contenido de este importante nutriente.

Lo ideal es mantener niveles saludables de ácido úrico, pues es fundamental para prevenir problemas de salud asociados con su acumulación.

Siempre es recomendable seguir las pautas médicas y consultar a un profesional de la salud antes de realizar cambios significativos en la dieta o el estilo de vida. Con una dieta equilibrada y hábitos de vida saludables, se puede disfrutar de una mejor calidad de vida y bienestar general.