Los triglicéridos son un tipo de grasa (el más común) que provienen de alimentos, especialmente mantequilla, aceites y otras grasas que se consumen, pero también provienen de calorías adicionales, y estas son las calorías que se comen, pero que el cuerpo no necesita de inmediato, de acuerdo con Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.
Además, indicó que los factores que pueden subir su nivel de triglicéridos incluyen:
- Comer regularmente más calorías de las que se queman, especialmente si se consume mucha azúcar.
- Tener sobrepeso u obesidad.
- Fumar cigarrillos.
- Ciertos medicamentos.
- Algunos trastornos genéticos.
- Enfermedades de la tiroides.
- Diabetes tipo 2 mal controlada.
- Enfermedades del hígado o renales.
De hecho, hay que tener claro que tener este lípido elevado puede contribuir al endurecimiento de las arterias o al engrosamiento de las paredes arteriales (arterioesclerosis), lo que aumenta el riesgo de sufrir un accidente cerebrovascular, ataque cardíaco y cardiopatías, pero los triglicéridos extremadamente altos también pueden causar inflamación aguda del páncreas (pancreatitis).
Niveles de triglicéridos
El Instituto Nacional del Corazón, los Pulmones y la Sangre de Estados Unidos señaló que las concentraciones de triglicéridos habitualmente se encuentran en las siguientes categorías:
- Saludables: Por debajo de 150 miligramos por decilitro (mg/dl) en adultos; por debajo de 90 mg/dl en niños y adolescentes (de 10 a 19 años).
- Ligeramente altos: Entre 150 y 199 mg/dl.
- Altos: Entre 200 y 499 mg/dl.
- Muy altos: Por encima de 500 mg/dl
Ahora bien, los triglicéridos altos en sangre se diagnostican a través de un examen de sangre, y de tenerse altos es importante tener cambios en el estilo de vida, como, por ejemplo:
- Controlar el peso.
- Realizar actividad física regular. Es importante procurar realizar al menos 30 minutos de actividad física moderada todos los días.
- No fumar.
- Limitar el azúcar y los alimentos refinados. Los carbohidratos simples, como el azúcar y los alimentos hechos con harina blanca o fructosa, pueden aumentar los triglicéridos.
- Limitar el alcohol. La recomendación es no consumir más de un trago al día si se es una mujer y no más de dos si se es un hombre. Un trago se define como 12 onzas (350 mL) de cerveza, 5 onzas (150 mL) de vino o 1.5 onzas (45 mL) de licor fuerte.
- Cambiar de grasas saturadas a grasas más saludables. Reemplazar las grasas saturadas que se encuentran en las carnes por grasas más saludables que se encuentran en las plantas, como los aceites de oliva y colza (canola). Además, en lugar de carne roja, prueba pescado rico en ácidos grasos omega-3, como la caballa o el salmón.
Entre tanto, el portal portugués de salud, nutrición y bienestar, Tua Saúde, señaló que el agua de avena con canela también sirve para reducir los triglicéridos, ya que “la avena contiene betaglucanos, un tipo de fibra soluble que ayuda a disminuir la absorción de grasas a nivel del intestino, y la canela es rica en antioxidantes, por lo que ambas en conjunto favorecen la disminución de los triglicéridos y del colesterol”.
Así las cosas, para obtener los beneficios hay que hervir 500 ml agua y agregar 1/2 taza de avena en y un palo de canela que se debe dejar reposar durante toda la noche. Al día siguiente se debe colar la mezcla y se bebe todos los días, preferiblemente en ayunas.
De todos modos, la información antes dada no sustituye la asesoría médica y es de vital importancia consultar a un experto de la salud para que sea este quien explique el tema mencionado.