La caspa es un problema del cuero cabelludo que afecta a millones de personas en todo el mundo y si bien no representa un riesgo para la salud, puede llegar a ser incómoda e incluso desagradable.

Conocida como dermatitis seborreica, la caspa es una afección caracterizada por la descamación excesiva del cuero cabelludo que se manifiesta a través de la aparición de pequeñas partículas blancas o amarillentas que se desprenden sobre los sitios cercanos al pelo, especialmente visible sobre los hombros.

Aunque las causas de la caspa aún no se comprenden por completo, sí hay unos factores que pueden desencadenar en la adquisición de esta condición. Entre estos se encuentra por ejemplo el crecimiento excesivo de un hongo llamado Malassezia, que se encuentra de forma natural en el cuero cabelludo y además de la caspa también puede producir una enfermedad infecciosa y no contagiosa de la piel llamada Pitiriasis versicolor.

Otros de los factores están relacionados con el aumento de la producción de sebo, el aceite natural del cuero cabelludo, que puede causar irritación y descamación; la sensibilidad o reacción alérgica a productos para el cuidado del cabello; o el mismo estrés emocional representado en desequilibrios hormonales y cambios estacionales que pueden desencadenar o agravar los síntomas de la caspa.

Los hombros es una de las partes más comunes del cuerpo donde es visible la caspa. | Foto: Libre de derechos

Cuando el problema es crónico lo más recomendable es buscar ayuda profesional que permita un oportuno diagnóstico y tratamiento, sin embargo, en muchas ocasiones la caspa puede tratarse de una manera fácil a través de remedios caseros y mucho más económicos. Estos son algunos de los más comunes.

1. Aceite de coco: este producto tiene propiedades antimicrobianas y antifúngicas que pueden ayudar a combatir el Malassezia. Aplicar una pequeña cantidad de aceite de coco en el cuero cabelludo, masajear suavemente y dejarlo actuar durante al menos 30 minutos antes de lavarlo, puede ser efectivo.

2. Vinagre de manzana: el vinagre de manzana equilibra el pH del cuero cabelludo y ayuda a controlar el crecimiento excesivo de hongos. Se puede usar diluyendo una parte de vinagre con dos partes de agua y aplicarlo en el cuero cabelludo después de lavarlo. Tras su acción durante algunos minutos se enjuaga bien.

Es de vital importancia hacer hincapié en que el consumo de vinagre de manzana debe ser autorizado por un profesional de la salud, dado que hay personas que son alérgicas y no lo saben. | Foto: Getty Images/iStockphoto

3. Aloe vera: el gel de aloe vera tiene propiedades hidratantes y calmantes que pueden aliviar la irritación del cuero cabelludo. Su forma de uso es sencilla, aplicándolo directamente en el cuero cabelludo y dejándolo actuar por 20 o 30 minutos para finalmente removerlo con abundante agua.

4. Té verde: esta preparación contiene antioxidantes y propiedades antifúngicas que pueden ayudar a reducir la caspa. Una taza de té verde fría y aplicada sobre el cuero cabelludo con un masaje para luego enjuagarlo es la forma de utilizar apropiada esta preparación.

5. Bicarbonato de sodio: contribuye a eliminar las células muertas del cuero cabelludo y reducir la descamación. Este compuesto se aplica sobre el cabello diluído en agua y tras un masaje suave por unos minutos, se retira con agua.

La caspa puede ser una afección molesta, pero con remedios caseros adecuados es posible controlarla y mejorar incluso la salud del cuero cabelludo. No obstante, siempre es importante tener en cuenta la importancia de una buena higiene capilar, utilizar productos suaves y evitar el estrés excesivo, una de las principales causas de su aparición.

La caspa ignorada tras su aparición puede causar picazón intensa y constante que puede llevar a la irritación y el enrojecimiento y con ellas la llegada de posibles infecciones.

También, si la caspa no se trata adecuadamente, la inflamación y la irritación crónicas del cuero cabelludo pueden debilitar los folículos capilares y contribuir a la caída del cabello. La pérdida de cabello relacionada con este problema puede ser temporal o en casos más graves, incluso permanente.