Hay síntomas que su cuerpo empieza a sentir y que aunque para usted pueden pasar desapercibidos, lo cierto es que quieren darle una alerta de que algo se esta presentando. El sueño, el cansancio, un dolor en determinada zona del organismo, entre otros, pueden ser el primer aviso de alguna enfermedad.
La hipertensión y la diabetes son dos de los padecimientos que siempre dan aviso. El primero puede presentarse con dolores de cabeza, dolor en el rostro y hasta inflamación y el segundo puede manifestarse a través de diversos síntomas que variarán según el tipo de diabetes que padezca.
Los síntomas de la diabetes incluyen:
1. aumento de apetito o fatiga,
2. visión borrosa,
3. aumento de la sed y de las ganas de orinar,
4. entumecimiento u hormigueo en las manos o los pies,
5. y pérdida de peso sin razón aparente.
Entre la diabetes tipo 1 y la tipo 2 existe una diferencia de tiempo, es decir, en la tipo 1 los síntomas pueden aparecer en cuestión de semanas, pero en la la diabetes tipo 2 estos progresan muy despacio, y pueden ser tan leves que a veces ni siquiera se notan.
Diabetes tipo 1
Ocurre cuando el sistema inmunitario, que combate las infecciones, ataca y destruye las células beta del páncreas que son las que producen la insulina. Según los científicos este tipo de diabetes es causada por virus que pueden desencadenar la enfermedad.
Diabetes tipo 2
La forma más común de la enfermedad es causada por varios factores, entre ellos, el estilo de vida y los genes. En este caso influye el sobrepeso, la obesidad y la inactividad física.
Una persona inactiva y con sobrepeso tiene mayor probabilidad de desarrollar diabetes tipo 2. Algunas veces, el exceso de peso causa resistencia a la insulina y es frecuente en personas con diabetes tipo 2. El exceso de grasa en el vientre también está vinculado con la resistencia a la insulina, la diabetes tipo 2 y las enfermedades del corazón y los vasos sanguíneos.
Resistencia a la insulina
La diabetes tipo 2 comienza con la resistencia a la insulina, una afección en la que el músculo, el hígado y las células grasas no usan adecuadamente la insulina. El cuerpo necesita más insulina para que la glucosa pueda ingresar en las células, por ello al principio, el páncreas produce más insulina para cubrir el aumento de la demanda, pero con el tiempo deja de producirla y es allí donde aumentan los niveles de glucosa en la sangre.
Además también es necesario nombrar que el ser hereditaria y tener ciertos genes también pueden interceder para que la persona sea más propensa a sufrir de esta enfermedad.
Diabetes durante el embarazo
Los científicos afirman que la diabetes gestacional es causada por cambios hormonales, factores genéticos y factores del estilo de vida. Las hormonas producidas por la placenta contribuyen a la resistencia a la insulina, la cual se presenta en todas las mujeres hacia el final del embarazo.
Y aunque la mayoría de las mujeres embarazadas pueden producir suficiente insulina para superar la resistencia a la insulina, lo cierto es que algunas no lo hacen.
Otras causas
Algunas mutaciones genéticas, enfermedades, una lesión del páncreas y ciertas medicinas, también pueden causar diabetes.
- La diabetes monogénica es causada por mutaciones o cambios en un solo gen. Estos cambios suelen transmitirse entre miembros de la familia, pero a veces la mutación tiene lugar espontáneamente. Los tipos más comunes de diabetes monogénica son la diabetes neonatal, la cual se presenta durante los primeros seis meses de vida y la diabetes del adulto de inicio juvenil, la cual se da en la adolescencia.
- La fibrosis quística produce un exceso de mucosidad espesa que causa cicatrización en el páncreas. Dichas cicatrices impiden que el páncreas produzca suficiente insulina.
- La hemocromatosis hace que el cuerpo almacene demasiado hierro. Si la enfermedad no se trata, el hierro se acumula en el páncreas y puede dañarlo.