El hígado es el órgano más grande del cuerpo que se ubica en la parte superior del abdomen y limpia la sangre y ayuda a la digestión secretando bilis, de acuerdo con el Instituto Nacional del Cáncer de Estados Unidos.
No obstante, Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, señala que existen muchos tipos de enfermedades hepáticas, como, por ejemplo:
- Enfermedades causadas por virus, como la hepatitis A, la hepatitis B y la hepatitis C.
- Enfermedades causadas por drogas, venenos o toxinas o por ingerir demasiado alcohol. Los ejemplos incluyen enfermedad por hígado graso y cirrosis.
- Cáncer de hígado. El cáncer se origina cuando las células en el cuerpo comienzan a crecer en forma descontrolada.
- Enfermedades hereditarias, como hemocromatosis y la enfermedad de Wilson.
Ahora bien, Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, puntualizó que la enfermedad hepática no siempre causa signos y síntomas perceptibles, pero si se presentan signos y síntomas de enfermedad hepática, estos pueden incluir los siguientes:
1. Color amarillento en la piel y los ojos (ictericia).
2. Picazón en la piel.
3. Orina de color oscuro.
4. Color pálido de las heces.
5. Tendencia a que aparezcan moretones con facilidad.
Entre tanto, para conocer si el hígado está funcionando adecuadamente, la biblioteca explicó que hay que realizar algunos análisis de sangre que miden diferentes enzimas, proteínas y sustancias producidas por el hígado, tales como:
- Albúmina: Proteína producida en el hígado
- Proteínas totales: Mide la cantidad total de proteínas en la sangre.
- ALP (fosfatasa alcalina), ALT (alanina transaminasa) AST (aspartato aminotransferasa) y gamma-glutamil transpeptidasa (GGT): Estas enzimas son producidas por el hígado.
- Bilirrubina: Producto de desecho producido por el hígado.
- Lacta to-deshidrogenasa (LD): Enzima presente en la mayoría de las células del cuerpo. Se libera a la sangre cuando las células han sido dañadas por una enfermedad o lesión
- Tiempo de protrombina (TP): Proteína que interviene en la coagulación de la sangre
¿Cómo cuidar el hígado?
1. Tener una dieta saludable: hay que elegir alimentos ricos en fibra, con bajo contenido graso y pocas calorías, y centrarse en las frutas, las verduras y los granos integrales. Además, la Organización Mundial de la Salud (OMS) indica que una dieta sana incluye diariamente al menos 400 g de frutas y hortalizas al día. Respecto a las grasas y azúcares, menos del 10 % de la ingesta calórica total debe ser de azúcares libres y menos del 30 % de la ingesta calórica diaria debe proceder de grasas. Finalmente, la OMS explica que se deben consumir menos de cinco gramos de sal al día y la sal debería ser yodada.
2. Hacer ejercicio: es de vital importancia hacer ejercicio y lo recomendado es hacer al menos 150 minutos de actividad aeróbica moderada o 75 minutos de actividad aeróbica intensa a la semana, o una combinación de actividad moderada e intensa.
3. Beber alcohol con moderación:
- Para la mayoría de las mujeres, beber moderadamente significa no más de un trago estándar al día.
- Para la mayoría de los hombres, significa no más de dos tragos estándar al día.
4. No fumar: Usar tabaco por mucho tiempo puede incrementar el riesgo de desarrollar muchos problemas de salud.
De todos modos, la información antes dada no sustituye la asesoría médica y es de vital importancia consultar a un experto de la salud para que sea este quien explique el tema mencionado.