El mal aliento bucal, también conocido como halitosis, puede ser un problema vergonzoso y frustrante para quienes lo padecen. De ahí la importancia de prestar atención a esta afección para poder tratarla a tiempo y evitar un problema mayor.
Y es que algunas personas deciden atacar el mal aliento intentando eliminar las bacterias que se encuentran presentes en la boca y, pese a que esto puede significar el alivio para algunas personas, otras no verán cambios por que la causa se encuentra en el estómago.
Principales causas
- La hidratación adecuada es crucial para mantener una buena salud digestiva. Beber suficiente agua a lo largo del día ayuda a mantener el equilibrio en el estómago y promueve la producción de saliva, que a su vez ayuda a eliminar las bacterias causantes del mal aliento. Además, el agua también ayuda a prevenir la sequedad bucal, que puede ser una causa común de halitosis.
- Una alimentación saludable es fundamental para mantener una buena salud digestiva. Incluir alimentos ricos en fibra, como frutas, verduras y granos enteros, puede ayudar a promover la digestión adecuada y prevenir el estreñimiento, que a menudo está asociado con el mal aliento. Además, los alimentos ricos en fibra pueden actuar como una especie de limpiador en el sistema digestivo, ayudando a eliminar los residuos y las toxinas acumuladas.
- Control del estrés: el estrés crónico puede afectar negativamente la salud digestiva y contribuir al mal aliento, debido a que este estado puede ralentizar la digestión y alterar el equilibrio de las bacterias beneficiosas en el estómago.
Infusiones para eliminar el mal aliento
- Infusión de menta: esta es reconocida por sus beneficios en el sistema digestivo y ayuda a neutralizar el mal olor. Para prepararla solo debe tomar una cucharadita de la planta y mezclarla con un vaso de agua hirviendo, debe dejarla reposar por 2 minutos al fuego y luego dejar que se enfríe 10 minutos para luego tomarla.
- Infusión de perejil con vinagre de manzana: para esta preparación debe usar dos ramas de la planta y dejar reposar al interior de media taza de vinagre de manzana durante 10 o 15 minutos. Pasado este tiempo puede sacarlas y masticar el perejil por tres minutos.
Recuerde que al ser naturales, estos remedios pueden ser consumidos dos veces al día y también puede rotarlos entre sí para observar resultados. Aunque lo más importante es que mantenga buenos hábitos y le consulte a un profesional de la salud en dado caso de que su problema no pueda solucionarse con las infusiones.
Cabe mencionar que si el problema persiste a pesar de seguir los consejos mencionados anteriormente, es recomendable consultar a un profesional de la salud para que pueda tratar su problema de forma más específica de acuerdo a sus necesidades.
Entre los médicos que puede visitar se encuentran los dentistas o un médicos especializados en gastroenterología, quienes le pueden ayudar a obtener una evaluación y un diagnóstico adecuados para que posteriormente pueda entrar en tratamiento.