Una de las principales claves para tener un buen cuidado de los perros durante todas las etapas de la vida del canino, es reconocer cuáles son los síntomas de que esta mascota tiene parásitos.
Distinguir los síntomas generales de si un perro está intoxicado será clave para lograr desparasitarlo a tiempo para reducir los riesgos de que estos parásitos se propaguen.
Algunos de los principales signos que indican que un perro tienen parásitos son la tos, diarrea, vómito y el letargo, aunque estos síntomas no son exclusivamente de parásitos, existen otros síntomas que dependen del tipo del parásito.
Por ejemplo, en el caso de los parásito internos, la mayoría de los caninos no muestran signos hasta que la infección es moderada o grave, no obstante, existen dos opciones.
La primera opción son las tenias, que desprenden segmentos llenos de huevos que parece granos de arroz, estos huevos pueden verse en las heces del perro como alrededor de su ano y en zonas de la cara.
La otra opción son las ascárides, este parásito puede verse en la heces o el vómito del perro, y también tienen forma de pequeños gusanos blancos.
Pese a estas indicaciones, es muy complicado determinar si un perro tiene parásitos, por eso se recomienda acudir al veterinario.
Principales señales de parásitos internos
- Tenia: verás gusanos en forma de arroz en las heces.
- Gusanos redondo: Vómitos.
- Gusano látigo: Diarrea y pérdida de peso.
- Anquilostomas: Encías pálidas.
Para identificar los síntomas de parásito externos se debe estar revisando frecuentemente la piel, el pelaje del perro, estos tips ayudarán a encontrar parásitos que puedan producir una infección.
- Picor o rascado excesivo.
- Piel seca y escamosa.
- Pelaje seco.
- Pérdida anormal de pelo
Expertos explican por qué su perro se emociona cuando regresa a casa
Después de un día lleno de obligaciones en el trabajo o en el estudio, llegar a casa es el momento más esperado. Aunque para cualquier persona la hora del descanso es sagrada, la emoción de regresar al hogar es diferente para quienes viven con un amigo peludo, que los espera en la puerta con ladridos y agitando la cola.
No en vano se dice que el mejor amigo del hombre es el perro, pues cualquier persona que viva con uno puede dar fe de su lealtad y compañía. Una de las mayores muestras de afecto de un canino es, precisamente, recibir a su amo con alegría. Las reacciones de la mascota son múltiples y varían dependiendo del comportamiento habitual del animal y hasta de la raza.
No obstante, esta ola de besos y muestras de cariño podría tener una explicación científica. De hecho, varios estudios indican que las mascotas pueden sienten afecto por sus amos. Gregory Berns, neurólogo y docente de Emory University School of Medicine en Atlanta, Estados Unidos, analizó las diferentes reacciones que mostraban las mascotas ante la llegada de distintas personas.
A través de resonancias magnéticas, se estudió el comportamiento de los perros y se llegó a varias conclusiones. Durante el primer experimento, los investigadores observaron imágenes cerebrales de un perro mientras estaba despierto y en acción.
Al analizar estos resultados se concluyó que los perros distinguen a los seres humanos como miembros de su especie. Incluso, el estudio indicó que una existe parte del cerebro destinada al afecto que el animal genera el canino en relación a sus vínculos familiares y, específicamente, hacia los humanos.
Por otro lado, se aplicaron distintos estímulos olfativos relacionados con los dueños de estos peludos. Con esto, la investigación descubrió patrones de reacciones en distintos perros, similares a los patrones que un animal manifiesta cuando obtiene algún tipo de recompensa. De hecho, el neurólogo concluyó que algunos perros distinguen a sus amos como parte de su familia.