La vitamina K es un nutriente que el cuerpo necesita para estar y permanecer sano. Esta vitamina es muy importante para la coagulación de la sangre y la salud de los huesos, entre otras importantes funciones del cuerpo.
Se sospecha de una carencia de vitamina K cuando se producen sangrados anormales en una persona en situación de riesgo.
Además si es de aquellos que deben consumir algún tipo de anticoagulante, como la warfarina por ejemplo, es muy importante que consuma la misma cantidad de vitamina K todos los días, ya que si llega a presentarse un cambio repentino en la cantidad de vitamina K que ingiere, se podría llegar a presentar un sangrado peligroso, si consume menos, o en su defecto coágulos sanguíneos, si consume más.
Según el National Institute of Health, la cantidad promedio diaria que requiere un bebé hasta los 6 meses de edad es de 2.0 mcg, para los hombres adultos mayores de 19 años de edad, es necesario 120 mcg, mientras que para las mujeres adultas mayores de 19 años de edad, necesitan de 90 mcg.
Alimentos que son fuente de vitamina K
La vitamina K también se puede encontrar en varios alimentos. Para obtener las cantidades de vitamina K recomendadas son:
- Aceites vegetales
- Arándanos azules
- Higos
- Hortalizas de hojas verdes como la espinaca, col rizada, brócoli y lechuga
- Carne, queso, huevos y granos de soja
- Perejil
- Berros
- Orégano seco
- Garbanzos
- Col de bruselas
- Salvado
- Lentejas
El portal indica que es poco común presentar deficiencia de vitamina K. “En los Estados Unidos, la mayoría de las personas obtiene suficiente vitamina K de los alimentos que consumen. Además, las bacterias en el colon fabrican cierta cantidad de vitamina K que el cuerpo absorbe. Sin embargo, algunas personas tal vez tengan dificultades para obtener suficiente vitamina K”, asegura.
Esta dificultad se puede presentar en los recién nacidos que no reciben una inyección de vitamina K al nacer, o en las personas que tienen ciertos trastornos como fibrosis quística, la enfermedad celíaca, colitis ulcerosa o el síndrome de intestino corto, que disminuyen la cantidad de vitamina K que el cuerpo absorbe.
Las Guías alimentarias para los estadounidenses, publicadas por el gobierno federal, destacan que la gente debería obtener la mayor parte de sus nutrientes de los alimentos y las bebidas.
Los alimentos contienen vitaminas, minerales y fibra dietética, los cuales benefician la salud. Además hay casos donde los alimentos enriquecidos y los suplementos dietéticos resultan muy útiles cuando no se pueden satisfacer las necesidades de uno o más nutrientes.
En caso de no consumir suficiente vitamina K
Una de las señales a las que debe prestarle atención y que demuestran una deficiencia grave de vitamina K, es la aparición de hematomas o moretones, al igual que problemas de sangrado, esto debido a que la coagulación de la sangre se vuelve más lenta.
Hay que tener en cuenta que la deficiencia de vitamina K podría reducir la fuerza de los huesos y aumentar el riesgo de osteoporosis, pues el cuerpo requiere de vitamina K para la salud ósea.
La vitamina K en la salud
Osteoporosis
Es muy importante si lo que se quiere es tener huesos sanos. Las investigaciones indican que quienes consumen alimentos ricos en vitamina K cuentan con huesos más fuertes y con menos probabilidades de romperse la cadera que las personas que consumen menos de estos alimentos.
Enfermedad coronaria
Por ahora los científicos estudian si los niveles bajos de vitamina K en la sangre aumentan el riesgo de enfermedad cardíaca, posiblemente por lograr que los vasos sanguíneos que viajan al corazón se vuelvan más rígidos y estrechos.