La enfermedad de Parkinson es un trastorno degenerativo de progresión lenta que afecta zonas específicas del encéfalo. Según el portal de salud Manual MSD, se caracteriza por temblores cuando los músculos están en reposo (temblor en reposo), y cuando hay tono muscular aumentado (rigidez), lentitud en los movimientos voluntarios y dificultades para mantener el equilibrio (inestabilidad postural). En muchos pacientes se produce un deterioro cognitivo o se desarrolla una demencia.
El portal señla que la enfermedad de Parkinson es el segundo trastorno degenerativo del sistema nervioso central más común después de la enfermedad de Alzheimer. Afecta a alrededor de 1 de cada 250 personas mayores de 40 años.
Asimismo, las estadísticas señalan que aproximadamente 1 de cada 100 personas de 65 años o más la padecen y 1 de cada 10 personas de 80 años o más.
Los especialistas afirman que este mal suele comenzar entre los 50 y los 79 años de edad. Es muy poco habitual que afecte a niños o adolescentes.
Teniendo en cuenta los estudios realizados sobre esta enfermendad, los hombres son más vulnerables que las mujeres a padecerla y un dato importante para tener en cuenta es que el Parkinson no tiene cura.
Alucinaciones, nuevo síntoma
Según un estudio publicado en el medio especializado Nature Mental Health, las alucinaciones de presencia podrían ser un fenómeno frecuente pero poco reportado en los pacientes con párkinson y podría aparecer de manera muy temprana en el curso de la enfermedad.
Entre las personas con Parkinson, son más comunes las alucinaciones visuales, a menudo ven personas o animales. Tienden a tener colores vivos ya que sucede por la noche. Por lo general, no son aterradoras y pueden volverse familiares. Por ejemplo, una persona puede alucinar periódicamente a un cachorro con un collar rojo.
Estos son alguno de los cambios perceptuales que se desarrollan dentro de un espectro:
- Leves : ilusiones, percepciones erróneas o alucinaciones sin forma, como un movimiento en las sombras. La persona reconoce que no son reales.
- Ligeras : alucinaciones formadas, donde la persona ve a un niño o animal pequeño, como un gato. Parece real, pero la persona sabe que no lo es.
- Moderadas: alucinaciones formadas, como un hermano o una persona. Hay una perdida de conocimiento y la persona piensa que la alucinacion es real.
- Severas : pueden ser negativas. Por ejemplo, la persona puede pensar que un extraño está tratando de hacerle daño a él o ella, o a un ser querido. Los delirios también pueden ser agradables: la persona podría pensar que vive en un jardín o en un hotel todo incluido.
Dado este rango, los delirios pueden afectar fácilmente la calidad de vida de una persona. Al experimentar una alucinación es común que la persona que lo experimenta se sienta tranquila, pero que los miembros de la familia se sientan alarmados.
En Parkinson. org se reveló que por lo menos del 20 al 30 % de personas con diagnóstico de parkinson suelen experimentar alucinaciones visuales que no son relacionadas con la enfermedad, ya que pueden ser resultado de la medicación o una enfermedad subyacente.
Otros síntomas que pueden apareecer con la enferdad son:
- Estreñimiento: el National Institute of Diabetes and Digestive and Kidney Diseases (NIDDK) menciona que “es una afección en la cual la persona podría tener menos de tres evacuaciones a la semana”. Lo que quiere decir que las heces son grumosas y secas, que aunque el autocuidado puede ser parte de la solución, en algunos casos es importante consultar con un profesional para seguir sus indicaciones.
- Presión arterial: de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS) “la hipertensión se diagnostica y trata a menos de la mitad de los adultos que la presentan (solo al 42 %)”, sin que ninguna persona esté exenta a padecerla. Normalmente, los factores de riesgo que aumentan las probabilidades de niveles altos de presión arterial —conocida también como hipertensión— son: el consumo bajo de frutas y verduras, pero excesivo de sal y la inactividad física, menciona la OMS.