El consumo de alcohol no es algo de este siglo; por el contrario, esta bebida ha acompañado a los seres humanos desde la antigüedad, siendo un elemento presente en rituales y los encuentros sociales.

Hoy sigue formando parte de la cultura, en diferentes presentaciones: cerveza, vinos y alcoholes destilados como el ron, el vodka o la ginebra, estos últimos además se emplean en la preparación de diversos cócteles.

Pese a que se ha normalizado la ingesta de bebidas alcohólicas en medio de las fiestas, celebraciones o en la media tarde con amigos, lo cierto es que en cantidades excesivas puede derivar en una adicción y volverse perjudicial para la salud del organismo.

El alcohol sigue formando parte de la cultura en diferentes presentaciones: cerveza, vinos y alcoholes destilados como el ron, el vodka o la ginebra, estos últimos además se emplean en la preparación de diversos cócteles.

De acuerdo con los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, en el largo plazo, esta sustancia propicia el desarrollo de diversas afecciones y desmejorar la calidad de vida. Entre las consecuencias más serias de este mal hábito es que puede alterar la personalidad de los individuos, afectando su salud mental.

Sin embargo, expertos en el tema, indican que hay un tipo de alcohol que es el que menos daño le hace al cuerpo. Se trata del vino, este puede contrarrestar el envejecimiento prematuro, contribuir al tratamiento de las encías infectadas, ayudar a la pérdida de peso y reducir significativamente los niveles de colesterol.

Entretanto, el portal Guarda 14 explica cuánto alcohol tiene cada bebida:

Destilados

  • Absenta: entre 65 y 89 grados.
  • Ron: entre 30 y 80 grados.
  • Whisky: entre 40 y 62 grados.
  • Orujo: entre 40 y 60 grados.
  • Vodka: entre 37 y 60 grados.
  • Mezcal: 55 grados.
  • Tequila: entre 37 y 50 grados.
  • Ginebra: entre 35 y 47 grados.

Fermentados

  • Vino: entre 3,5 y 15 grados.
  • Cerveza: entre 2,5 y 15 grados.
  • Sidra: entre 5 y 7 grados.

“También existen casos extremos donde la graduación de alcohol supera el 95%. El título de la bebida con más alcohol del mundo se reparte entre un vodka de Polonia, un aguardiente de Bolivia y un licor de grano de Estados Unidos”, revela Guarda 14.

El vodka polaco Spyritus contiene 96 % de etanol. Se recomienda consumir en cócteles y acompañado de comidas típicas de Polonia, como el pescado en salazón.

El Cocoroco es un aguardiente destilado de la caña de azúcar que también contiene 96 % de alcohol y se elabora en Bolivia.

El vodka de Polonia es una de las bebidas con más alcohol del mundo. | Foto: Ziga Plahutar

Estados Unidos es la cuna del Everclear 190. Su graduación es del 96 %. Se trata de un alcohol de grano inodoro, incoloro e insípido que está pensado como base para crear otros licores.

El poitín es considerado el precedente del whisky y debido a su alta graduación llegó a estar prohibido. Su graduación es del 95 % de etanol.

Mientras que el vino es la bebida alcohólica más saludable, ya que por las propiedades intrínsecas de la uva y su proceso de elaboración cuenta con propiedades que pueden beneficiar la salud. Sin embargo, como sucede con cualquier bebida que contenga alcohol, su consumo debe ser moderado.

“El vino tinto contiene polifenoles, entre ellos el resveratrol, que tiene propiedades antioxidantes y cardioprotectoras. Según estudios, puede estar asociado a un aumento del colesterol bueno y a un menor riesgo de coagulación. Además, tiene propiedades antiinflamatorias debido a su alto contenido en quercetina”, indica el portal especializado.

El consumo adecuado de vino tinto ayuda a prevenir enfermedades cardíacas.

Si se pasa al caso de los destilados, los menos perjudiciales son el tequila, el whisky y el ron. El primero de ellos aporta probióticos y es de los alcoholes más respetuosos con la microbiota intestinal. En el whisky se encuentran propiedades antioxidantes y en el ron hay propiedades antibacterianas, aunque por su contenido en azúcar, es mejor evitarlo en dietas hipocalóricas.