El cerebro es uno de los órganos principales para el desarrollo óptimo de un ser humano. La salud del sistema nervioso es fundamental para prevenir accidentes cerebrovasculares.

Es importante resaltar que los accidentes cerebrovasculares puede dejar secuelas graves, tanto en la parte física, como en la cognitiva. Ya que se pueden presentar parálisis e incluso la muerte.

Es importante recordar que cuando el flujo sanguíneo al cerebro se detiene parcial o totalmente, ocurre un accidente cerebrovascular o un ataque al cerebro.

Esto es extremadamente grave porque si este crucial órgano no recibe sangre, no se oxigena y las células neuronales pueden morir en minutos, lo que puede causar daño cerebral grave, discapacidad física y cognitiva permanente o incluso la muerte en la mayoría de los casos.

Por lo tanto, es crucial que aquellos que sospechan que un familiar o conocido está sufriendo de un accidente cardiovascular se comuniquen de inmediato con los servicios de emergencia para que el paciente pueda recibir tratamiento rápido y salvar su vida.

El cerebro necesita gran cantidad de nutrientes. | Foto: Getty Images

Los alimentos que fortalecen el cerebro

Como es conocido, la mayoría de nutrientes se pueden obtener con una dieta balanceada, y en el caso de la salud del cerebro y los nervios, no es la excepción, ya que este importante órgano necesita gran cantidad de sustancias para funcionar de manera óptima.

Los nutrientes son vitales en la vida de las personas. | Foto: Getty Images

Alrededor del 20% de la energía del organismo se utiliza para la actividad neuronal. La necesidad de glucosa del cerebro requiere que consuma al menos el 50% de los carbohidratos de la comida, por lo que es esencial satisfacer los requisitos diarios de nutrientes.

Entre los nutrientes esenciales se encuentran la vitamina B1 o tiamina, la cual ayuda en el metabolismo de los carbohidratos, es decir, los convierte en energía. Este proceso es crucial para el funcionamiento del corazón, los músculos y el sistema nervioso. El cansancio, la falta de concentración y la irritabilidad son síntomas de un déficit de este nutriente.

Para poder tener dichos nutrientes se deben consumir cereales integrales, las verduras, las vísceras, el hígado, los huevos y los cortes de cerdo libres de grasa.

Asimismo, la vitamina B2, también conocida como riboflavina, es esencial para el crecimiento, funcionamiento y desarrollo de las células. Además, participa en el proceso de generación de energía.

Los huevos, las vísceras y algunas hortalizas de hoja verde como la espinaca contienen riboflavina.

Por último, la producción de glóbulos rojos y la formación del ADN dependen de la vitamina B12 o cobalamina. Además, contribuye al funcionamiento regular del sistema nervioso.

La mayoría de los alimentos de origen animal contienen este nutriente naturalmente, como el hígado de la res, la leche, el pollo o los huevos.

Accidentes cerebrovasculares

Un aneurisma cerebral es una enfermedad cerebrovascular que se caracteriza por una dilatación de la pared arterial que puede desencadenar en una rotura. | Foto: Getty Images

Los médicos dividen los ataques al cerebro en dos categorías. La primera es el accidente cerebrovascular isquémico, que ocurre cuando un coágulo de sangre bloquea o cierra un vaso sanguíneo del cerebro. Es el tipo más frecuente, representando el 80 % de los ataques cerebrales.

Además, un vaso sanguíneo que se rompe puede causar un accidente cerebrovascular hemorrágico que llena el cerebro de sangre y presión.

También existe un tipo de accidente cerebrovascular isquémico llamado “mini derrame” que ocurre cuando el flujo sanguíneo al cerebro está obstruido por un breve período de tiempo. En este tipo de situaciones, es más probable que el paciente tenga una secuela neuronal.

La presión arterial alta aumenta el riesgo de ataques cerebrales. Las probabilidades aumentan debido a este padecimiento. De igual manera, las personas con diabetes deben estar atentas a este tipo de accidentes.

El riesgo de coágulos de sangre aumenta si tiene enfermedades cardíacas como la fibrilación auricular u otras afecciones cardíacas.

El fumar con frecuencia es un hábito que puede causar un derrame cerebral.

Se recomienda acudir a un médico de confianza si cree que puede tener un accidente cerebrovascular, ya que el profesional de la salud le dará un diagnóstico acertado.