El hipertiroidismo se define como una enfermedad en la que hay exceso de secreción de hormonas tiroideas y un aumento de la actividad funcional de la glándula tiroides. Entretanto, esta enfermedad es autoinmune, pues es el propio organismo el que genera los anticuerpos que estimulan esa glándula.
Ahora bien, los síntomas que se pueden presentar por esta enfermedad son varios, tales como: nerviosismo excesivo, insomnio, palpitaciones, cansancio inexplicable, sudoración fácil, mala tolerancia al calor, temblor de manos, pérdida de peso, a pesar de coexistir con apetito aumentado, y hasta diarreas. Además, en las mujeres se pueden presentar todos estos malestares sumados a una alteración en su ciclo menstrual.
Estos se deben, según un artículo de la Clínica Universidad de Navarra, a la aceleración de las funciones del organismo. Del mismo modo, en los adultos mayores se puede presentar el conocido hipertiroidismo apático, en el que los síntomas se encuentran muy atenuados y a veces solo se manifiestan por trastornos del ritmo cardiaco.
El artículo resalta que cuando uno de los síntomas que más se presenta son los ojos saltones, la probabilidad de que se trate de una enfermedad de Graves-Basedow, que es un tipo de hipertiroidismo, es muy elevada.
A propósito, hay varios tipos de hipertiroidismo, y en su mayoría, se deben a un exceso de formación de hormonas tiroideas. Por ello, en casi todos, el tamaño del tiroides se encuentra aumentado, es decir, además de hipertiroidismo, existe bocio, que se define como un aumento del volumen de la región anterior del cuello. Es así, como los hipertiroidismos más frecuentes son los que se presentan por el bocio difuso y el bocio nodular.
Ahora bien, prevenir esta enfermedad depende de si se padece una tiroides hiperactiva o hipoactiva. De ese modo, el especialista en ese tema sabrá qué recetar. Es de esa manera que, para tratar el hipertiroidismo, se utiliza un medicamento de hormona tiroidea artificial, administrado en forma de comprimido. Para este caso se debe tomar la pastilla a la misma hora todos los días.
Para conocer si en realidad tiene problemas de tiroides, en primer momento debe identificar los síntomas presentados anteriormente y, en caso de tener la mayoría de ellos, debe acudir a un médico especialista quien le hará seguimiento a esa afección.
En ese orden de ideas, lo primero que se realiza, en la mayoría de casos, es examinar el cuello del paciente, pues la tiroides está ubicada en la parte delantera de dicha zona, justo por encima de la laringe. El examen que realizará el especialista consistirá en presionar esta zona suavemente para detectar si existen cambios.
Otro de los exámenes que se llevan a cabo consiste en realizar un análisis de sangre, con la que se medirá los niveles de la hormona tiroidea. Además, en algunos casos la realización de una gammagrafia tiroidea puede ayudar a esclarecer el tipo y la función del bocio y, así, encuadrar mejor el tipo de hipertiroidismo.
Ahora bien, se debe resaltar que el hipertiroidismo puede presentarse a cualquier edad. De ese modo, los niños recién nacidos de madres con enfermedad de Graves-Basedow pueden presentar hipertiroidismo transitorio por paso transplacentario de anticuerpos.