El profesor David Sinclair ha ganado fama internacional por sus declaraciones sobre el envejecimiento, el investigador ha insistido en que este no es un proceso natural, sino más bien una enfermedad. En este momento, el profesor es titular en el Departamento de Genética del Centro Paul F. Glenn de Investigación sobre la Biología del Envejecimiento de la Facultad de Medicina de Harvard.
Además, es conocido por su trabajo para comprender por qué envejecemos y cómo frenar sus efectos. Obtuvo su doctorado en Genética Molecular en la Universidad de Nueva Gales del Sur, Sydney en 1995 y trabajó como investigador postdoctoral en el MIT. con el Dr. Leonard Guarente, donde descubrió una causa del envejecimiento de la levadura, así como el papel de Sir2 en los cambios epigenéticos impulsados por la inestabilidad del genoma. En 1999, se trasladó a la Facultad de Medicina de Harvard, donde ha enseñado biología del envejecimiento y medicina traslacional para el envejecimiento durante los últimos 23 años. Sus primeras investigaciones se centraron en las sirtuinas, que son enzimas modificadoras de proteínas que responden a los cambios en los niveles de NAD+ y a la restricción calórica (RC), con intereses asociados en epigenética, metabolismo energético, mitocondrias, aprendizaje y memoria, neurodegeneración y cáncer.
En las investigaciones destacadas por la Universidad está aquella que explica cómo la falta de comunicación entre los genomas mitocondrial y nuclear es una causa del deterioro fisiológico relacionado con la edad (The Mitochondrial Oasis Hypothesis, 2009), y la idea de que los cambios epigenéticos que hacen que las células pierdan su identidad son una principal causa del envejecimiento y este es un proceso reversible (The Information Theory of Aging, 2019).
En una entrevista con Business Insider, el doctor aseguró que ahora tiene 53 años y gracias al proceso fotoenvejecimiento que ha adelantado ahora, según su ADN, es una década más joven. Su secreto, en la misma entrevista, es cambiar el estilo de vida adoptando una dieta a base de plantas, cortar el alcohol de su vida y dormir bien.
“Mi edad biológica ha ido descendiendo en la última década a un punto donde mi predicción de vida es al menos una década adicional a lo que hubiera pasado si no hubiera hecho nada. Hay que decir que nunca es muy tarde”, aseguró a dicho medio. El profesor sostiene que el secreteo está en tomar al menos dos tés verdes diarios, ya que “contiene molecular que previenen el cáncer y otras enfermedades, incluso algunas propiedades antiinflamatorias”.
Así mismo, recomienda consumir suplementos que contengan resveratrol, que pueden extender la esperanza de vida en algunos organismos. Sinclair también promueve el ayuno intermitente, “Intento concentrar mi comida principal en unas pocas horas al día, siempre que sea posible, Y ese período de ayuno también ha tenido grandes beneficios en mi edad biológica estimada”, dijo al medio.
El experto enfatiza en que todos los días al menos pasa entre 16 y 18 horas sin consumir grandes cantidades de alimento, “eso es básicamente tener un almuerzo muy tardío o una cena abundante”, concluyó.