La cúrcuma es una de las especias que en los últimos años ha tenido mayor reconocimiento, también es conocida como azafrán indio o la especia dorada, una planta que se da principalmente el Asia Y Centroamérica, su distintivo color entre amarillo y naranja brillante ha cautivado por siglos las cocinas de distintas partes del mundo. Pero, más allá de su papel en la cocina.

La cúrcuma contiene un ingrediente activo llamado curcumina, una molécula con poderosas propiedades biológicas que han sido fuente de investigaciones durante los últimos años. Poco a poco la medicina ayurvédica (un antiguo sistema de tratamiento de la India), sugiere que este producto natural funciona para curar una serie de afecciones, que van desde el dolor crónico hasta la inflamación. Sumado a esto, en la medicina occidental ha comenzado a hacer el uso de esta como un posible analgésico.

La cúrcuma tiene muchos beneficios. | Foto: Neha Gupta

Entre los hallazgos más notables se encuentra la capacidad de la cúrcuma para combatir las inflamaciones. En varios estudios presentados por la Arthritis Foundation se ha presentado la idea de que la cúrcuma puede reducir la inflamación, lo que podría proporcionar alivio a las personas que padecen afecciones inflamatorias como la artritis. Incluso se recomienda una dosis de 400 a 600 miligramos de cúrcuma en cápsulas hasta tres veces al día en caso de inflamación.

Más allá de la inflamación, esta también se ha ganado una reputación como analgésico eficaz, especialmente en el alivio del dolor asociado con la artritis. Varios estudios han establecido que esta podría ser tan efectiva como el ibuprofeno para personas con dolencias en las rodillas, y se sugiere que se pueden tomar 800 mg de cúrcuma en forma de cápsula todos los días.

Otro aspecto que resalta de esta es su capacidad para proteger la salud del hígado, esto se debe a las propiedades antioxidantes que tiene, y que pueden actuar como escudo contra las toxinas que podrían dañar el hígado. Esto podría ser especialmente beneficioso para quienes toman medicamentos potentes para afecciones como la diabetes, que pueden afectar el hígado con el uso prolongado.

Cómo preparar el té de cúrcuma

Tenga en cuenta que para preparar esta infusión solo necesita un ingrediente principal: cúrcuma. Con una cucharadita de esta especia y agua es posible tener un par de tazas de té. El primer paso es colocar agua a hervir y luego de que alcance el punto de ebullición, bajar el fuego y agregar la cúrcuma.

Té de cúrcuma | Foto: Getty Images

Después, hay que dejar cocinar el té durante cinco minutos y cuando pase este tiempo se deja en reposo otros minutos. Finalmente, puede colar y servir el té. Esta infusión también va bien con el jengibre, por lo que si quiere darle un sabor diferente puede agregar unas rodajas de jengibre junto a la cúrcuma. Incluso, si desea que la bebida tenga un toque dulce, puede agregar una cucharadita de miel.

Otros beneficios de la cúrcuma

  • Puede aliviar el dolor. Muchas personas han utilizado la cúrcuma como analgésico, pero, además, esta especia tiene fama de aliviar el dolor que produce la artritis. Varios estudios respaldarían la capacidad de la cúrcuma para aliviar el dolor, que podría funcionar como un ibuprofeno en personas con artritis en las rodillas.
  • Mejora la función hepática. La cúrcuma tiene varias capacidades antioxidantes y su efecto parece ser tan poderoso que se cree que evita que las toxinas dañen el hígado. Esta podría ser una buena noticia para las personas que toman medicamentos fuertes para la diabetes u otras afecciones de salud que podrían afectar este importante órgano.
"Consumirlo, según los estudios, puede ayudar a reducir los síntomas de ansiedad", asegura la doctora en su entrevista para CNBC. Foto: Getty images. | Foto: Getty images
  • Puede ayudar a reducir el riesgo de desarrollar cáncer. La curcumina es prometedora como tratamiento contra el cáncer. Los estudios sugieren que tiene efectos protectores contra el cáncer de páncreas, el cáncer de próstata y el mieloma múltiple.