En el mundo laboral de la actualidad se maneja un estilo de vida frenético en donde en ciertas ocasiones no se alcanza a desayunar de la mejor manera, por lo contrario, solo se toma una taza de café, bebida altamente popular entre oficinistas por su estímulo al sistema nervioso central.
Además de esto, la cafeína puede aumentar la presión arterial y la frecuencia cardíaca a corto plazo, solo minutos después de una taza de la bebida. Por lo que se debe tener precaución si se sufre de hipertensión.
“La cafeína puede aumentar la tasa metabólica en reposo y el gasto de energía, lo que puede ser útil para controlar el peso corporal”, asegura un experto de Harvard.
La cafeína puede aumentar a corto plazo la presión arterial y la frecuencia cardíaca. Mientras que algunos bebedores disfrutan de este efecto, otros pueden experimentar nerviosismo o insomnio. Por esta razón, se ha aconsejado a personas con enfermedades cardíacas evitar la cafeína.
“La gente desarrolla tolerancia a la cafeína en unos pocos días, por lo que sus efectos no se pueden extrapolar a largo plazo. Con el tiempo, la cafeína puede aumentar la tasa metabólica en reposo y el gasto de energía, lo que puede ser útil para controlar el peso corporal”, señala el Dr. Hu, profesor de nutrición y epidemiología en la Escuela de Salud Pública de Harvard.