La enfermedad de Alzheimer es una enfermedad neurodegenerativa que afecta la memoria y otras funciones cognitivas. Si bien no existe un hábito o enfoque que pueda curar o revertir el Alzheimer, existen algunas prácticas que pueden ayudar a aliviar los síntomas y mejorar la calidad de vida de las personas que viven con esta enfermedad.

Así lo demostró un estudio de la Universidad de Berkeley en Estados Unidos que, revelando que el sueño reparador y profundo pueden contrarrestar el deterioro de la memoria provocado por el alzhéimer, lo que según los expertos, “podría ayudar a aliviar algunas de las consecuencias más devastadoras de la demencia”.

Dormir es importante para recargar energía y poder desempeñar de la mejor manera las actividades diarias. | Foto: Getty Images

Ahora bien, los resultados que fueron publicados en BMC Medicine, revelaron también que, el sueño profundo actúa como “factor de reserva cognitiva” aumentando la resistencia del cerebro ante una proteína conocida como beta-amiloide, relacionada a “la pérdida de memoria causada por la demencia”.

Cabe decir que, según esta y múltiples investigaciones más, las alteraciones del sueño se han asociado anteriormente con un mayor deterioro cerebral.

“Si creemos que el sueño es tan crítico para la memoria, podría ser el sueño una de esas piezas faltantes en el rompecabezas explicativo que nos diría exactamente por qué dos personas con las mismas cantidades de patología amiloide severa y viciosa tienen síntomas muy diferentes”, dice Matthew Walker, neurocientífico y autor principal del estudio.

El Alzheimer es un tipo común de demencia. | Foto: Getty Images

Otros hábitos clave para la estimulación cognitiva

La estimulación cognitiva implica mantener activa la mente y participar en actividades que desafíen y ejerciten las capacidades cognitivas de una persona. Esto permitirá que una persona sea menos propensa a desarrollar Alzheimer, y a su vez que permanezca consciente y alerta durante el día.

  • Haga ejercicios mentales: Realice actividades como crucigramas, rompecabezas, juegos de memoria y ajedrez, este tipo de juegos pueden ayudarle a mantener la mente activa.
  • Aprenda cosas nuevas: Continuar aprendiendo a lo largo de la vida puede ser beneficioso. Esto podría ser aprender un nuevo idioma, tomar clases de música, pintura o cualquier otra habilidad que despierte el interés.
  • Manténgase socialmente activo: La interacción social es importante. Participar en conversaciones, reuniones con amigos y familiares, y actividades en grupo puede estimular la mente y mejorar el bienestar emocional.
  • Haga ejercicio físico: La actividad física regular también es importante para la salud cerebral. El ejercicio mejora la circulación sanguínea y puede ayudar a mantener una mente más alerta.
La actividad física es clave en la rutina de las personas mayores. | Foto: Getty Images
  • Mantenga una rutina: Tener una rutina diaria predecible puede ser reconfortante para las personas con Alzheimer, ya que reduce la confusión y la ansiedad.
  • Use ayudas de memoria: El uso de calendarios, notas y recordatorios visuales puede ayudar a las personas con Alzheimer a mantenerse organizadas y recordar tareas diarias.
  • Apoyo emocional: Tener un sistema de apoyo comprensivo, ya sea a través de amigos, familiares o grupos de apoyo, puede ayudar a las personas que enfrentan el Alzheimer a lidiar con los desafíos emocionales y cognitivos.

Tenga en cuenta que, aunque implementar estas prácticas pueden aliviar los síntomas y mejorar la calidad de vida, el Alzheimer es una enfermedad progresiva y eventualmente afectará la memoria y otras funciones cognitivas de manera significativa.