Las setas u hongos comestibles son aquellos hongos que sirven como alimentos para el ser humano, los cuales son cultivados o recolectados. En ese sentido, existe uno que es conocido como el hongo shitake que contiene varias propiedades nutritivas como minerales, las vitaminas D, B1, B2, B3, y provee al organismo de casi todos los aminoácidos esenciales.

Por lo tanto, este hongo crece sobre materia en descomposición, sobre todo madera de roble, pero también de eucalipto o haya y se desarrolla en zonas cálidas y húmedas. De hecho, en la medicina tradicional china se le considera un alimento que favorece una vida longeva y sana y se usa para el tratamiento de infecciones, alteraciones del hígado, fatiga, enfermedades del riñón o el cáncer.

Su contenido proteico es comparable con el de la de carne, con menor contenido de lípidos y mayor cantidad de fibra. Una parte importante de esa fibra está formada por quitina, que ayuda a eliminar las grasas y el colesterol en el intestino.

Los hongos shitakes son utilizados por los cocineros en diferentes recetas. | Foto: Copyright - 2014 Portland Press Herald

Pero eso no es todo, ya que además de los beneficios nutritivos mencionados, el hongo shitake también posee múltiples propiedades medicinales. Y es que el shitake es un estimulador natural perteneciente al sistema inmunológico y puede ser una ayuda en caso de que se presenten infecciones por bacterias y virus. Para ello, el poder lo ejerce una sustancia llamada lentinano que, además de ser un inmunoestimulante, disminuye los niveles de grasas en la sangre, y posee efectos antibióticos, antivirales y antitrombóticos.

En cuanto al mundo de la gastronomía, es preferido tanto por chefs como personas amantes de la cocina por su textura y exquisito sabor, posicionándolo como un complemento ideal para platos como un risotto. Su aroma es profundo, con aromas a tierra, caramelo y nuez moscada.

Las propiedades de los shitakes ayudan a contrarrestar algunas enfermedades al fortalecer el sistema inmune. | Foto: © 2016 John S Lander

Por último, admite distintas presentaciones:

  • Al vapor, con un resultado fragante y delicado.
  • Salteado, método con el que ofrece todo su potencial.
  • Frito o asado, modo en el que el shitake resulta muy agradable al paladar.
  • En guisos o estofados, donde aporta un toque personal e inconfundible.