El Alzheimer es una enfermedad degenerativa que va acabando el sistema cognitivo de quien la padece. Es una de las demencias más comunes entres los adultos mayores.
Aunque este padecimiento no tiene cura, existen tratamientos que pueden mejorar notablemente la condición del paciente, siempre y cuando se detecten a tiempo.
El estudio arrojó que las personas cuyas madres han sufrido enfermedades degenerativas, tienen más probabilidades de desarrollar demencia. Así lo confirmó, un artículo publicado revista científica Jama Neurology, tras analizar los datos de 4.400 personas de 65 a 85 años que participaron en el estudio titulado “Anti-Amyloid Treatment in Asymptomatic Alzheimer’s Disease”.
En este estudio se les preguntó a los participantes sobre la memoria de sus progenitoras, además de si han tenido algún diagnóstico de alguna enfermedad degenerativa.
Entre los participantes que respondieron que sus madres han tenido fallas en la memoria, se detectó un rasgo en común; bajas cantidades de proteínas beta-amiloide, los cuales fueron notados por medio de tomografías por emisión de positrones.
“La acumulación de beta-amiloide es uno de los primeros procesos patológicos del alzhéimer y se produce en un estadio presintomático”, explicó Hyun-Sik Yang, neurólogo asociado al hospital Brigham and Women’s, y autor del estudio citado.
“Todos los participantes mostraban un funcionamiento cognitivo normal, pero algunos tenían acumulaciones significativas de beta-amiloide en el cerebro. La etapa pre-clínica del alzhéimer representa una venta única para las intervenciones preventivas, antes de que sea demasiado tarde; por ello, decidimos enfocarnos en el beta-amiloide antes que en otros procesos o síntomas”, dijo el experto.
Sin embargo, si usted cree que es propenso a padecer alguna enfermedad de la memoria, es imprescindible que acuda a un neurólogo para que le dé un diagnóstico certero, según cada caso en particular.