Como una práctica cultural bastante común en diferentes partes del mundo se ha definido la perforación de las orejas en las personas, en especial, cuando esta se realiza en las niñas pequeñas.

Aunque por años se ha manejado un debate sobre cuál es la edad adecuada para llevar a cabo el procedimiento en las niñas, la decisión de perforar las orejas es una responsabilidad que recae en los padres, quienes deben considerar los diversos factores antes de realizarlo.

Entre los temas que deben revisar los padres de familia son la edad, la salud general del menor y si se dispone de la capacidad de tener una higiene adecuada en esta zona del cuerpo.

Según expertos, los bebés deberían tener más edad cuando se le decida perforar las orejas. | Foto: Getty

Por su parte, los expertos indican que la decisión de perforar las orejas de un niño es una elección personal y cultural, pero es fundamental considerar la edad y las recomendaciones de los médicos. Además, se debe esperar hasta que el bebé tenga al menos 6 meses de edad y seguir los consejos de profesionales capacitados para minimizar los riesgos asociados.

Características a tener en cuenta

Edad:

Es crucial para evitar posibles complicaciones y asegurar una experiencia segura y exitosa. La mayoría de los expertos médicos y asociaciones pediátricas sugieren esperar hasta que el niño tenga cierta madurez y pueda expresar su deseo de tener las orejas perforadas.

Por lo general se sugiere esperar hasta los 6 meses de edad para minimizar los riesgos de infección y complicaciones, debido a que los lóbulos de las orejas ya están bien formados y suficientemente desarrollados para recibir la perforación de manera segura.

Es importante limpiar y desinfectar adecuadamente los lóbulos de las orejas y asegurarse de mantener las manos limpias durante todo el proceso de curación. | Foto: Getty

Salud:

Es esencial que el niño se encuentre en buen estado de salud al momento de realizar la perforación, ya que cualquier enfermedad o condición médica subyacente puede aumentar los riesgos asociados con el procedimiento.

Higiene adecuada:

Antes y después de la perforación, se deben seguir estrictas medidas de higiene para prevenir infecciones. Es importante limpiar y desinfectar los lóbulos de las orejas y asegurarse de mantener las manos limpias durante todo el proceso de curación.

Además, es fundamental acudir a un profesional con experiencia en la perforación de orejas en niños. Debe contar con las habilidades y el equipo adecuado para realizar el procedimiento de manera segura y estéril.

A esto se le suma que los padres o tutores deben comprender los riesgos y los cuidados posteriores necesarios antes de proceder con la perforación. Además, deben tener la capacidad de tomar una decisión informada en beneficio del niño.

Cuidados posteriores a la perforación de orejas

  • Después de la perforación es fundamental mantener las orejas limpias y libres de infecciones.
  • Lave sus manos antes de tocar las orejas o los pendientes.
Los cuidados posteriores a la perforación de orejas en niñas son fundamentales para garantizar una cicatrización adecuada y prevenir complicaciones. | Foto: Getty
  • Limpie suavemente alrededor de los pendientes con una solución salina o un limpiador específico recomendado por el profesional que realizó la perforación.
  • Evite tocar las orejas con las manos sucias o sin lavar.
  • Evite nadar en piscinas hasta que las orejas estén completamente curadas.
  • Para prevenir la adhesión del pendiente al tejido de la oreja, los expertos recomiendan rotar los pendientes con cuidado una o dos veces al día.
  • Durante el proceso de cicatrización, evite tocar o cambiar los pendientes a menos que sea absolutamente necesario.
  • Evite exponer las orejas a productos químicos como lociones, perfumes, maquillaje o productos para el cabello en las orejas hasta que estén completamente curadas.

Los cuidados posteriores a la perforación de orejas en niñas son fundamentales para garantizar una cicatrización adecuada y prevenir complicaciones. Además, hay que mencionar que la perforación de orejas es un procedimiento común y estético que muchas niñas y adolescentes eligen para lucir joyas y expresar su estilo personal.