El pepino es una hortaliza mezoamericana que está compuesto de agua, fibra y vitamina C. Es importante decir que las personas que tienen trastornos digestivos pueden sufrir efectos intestinales al momento de consumir esta legumbre y es básicamente inflamación, gases y diarrea debido a que hay componentes azufrados no nutricionales que se encuentran en las semillas y la cáscara. Es por eso que antes de realizar cualquier cambio en la dieta es importante consultar con un especialista.
Es importante que a la hora de consumir pepino, en cualquiera de sus presentaciones, retirar las semillas y las vainas que cubren las mismas, pues su consumo puede generar gases y otros trastornos. Sin embargo, algunos expertos recomiendan el consumo de este vegetal, pues trae algunos beneficios. Por ejemplo, “Debido a que el pepino está compuesto por aproximadamente un 96% de agua, su consumo es recomendable. Además, consumir agua de pepino es una excelente manera de mantenerse hidratado, especialmente durante los días calurosos o después de hacer ejercicio. El pepino tiene propiedades diuréticas”, aseguró Esteban Perdomo, nutricionista, dietista de la Universidad Nacional.
El pepino, según el mismo experto, mejora la digestión debido al alto contenido de fibra que tiene, su consumo ayuda a regular el tránsito intestinal y prevenir el estreñimiento, la diverticulitis y síndrome de Crohn, este último, el engrosamiento de las paredes intestinales que impiden el correcto funcionamiento del órgano digestivo. Esta hortaliza, versátil a la hora de preparar, también tiene propiedades sobre el sistema inmunológico por su contenido de Vitamina C, “que no solo es un potente antioxidante, sino que ayuda a la formación de colágeno en piel y huesos”, agregó.
Según los expertos, la preparación del agua de pepino también ayuda a eliminar toxinas y puede beneficiar la función cerebral y reducir el riesgo de enferemedades neurodegenerativas como el Alzheimer; el pepino tiene un gran contenido de fisetina, compuesto que ha demostrado propiedades neuroprotectoras.
¿Cómo preparar el agua de pepino?
Es importante lavar bien el pepino, cortarlo en rodajas finas, preferiblemente desvenando y descascarando la hortaliza, luego es necesario meterlo en una jarra grande con jugo de limón, y endulzante al gusto, si se desea también se pueden agregar otras hortalizas y hiervas frescas. Recuerde que esta bebida es una manera de mantenerse hidratado, pero debe tomarse con moderación.