La etapa de la niñez es el momento de la vida en que los seres humanos crecen, así como lo indican las mediciones que recurrentemente realizan los padres de familia. Sin embargo, una vez se alcanza la altura máxima, las personas no suelen revisar con frecuencia, si su estatura está aumentando disminuyendo.
Pero cuando una persona ya ha llegado a una edad madura, tiene una estatura más baja que cuando estaba en la juventud. Y, cuando alcanza la cuarentena, la estatura se ve reducida a un ritmo de un centímetro por década.
Además, por lo general, “esta pérdida es más acusada en mujeres que en varones”, según el quiropráctico y autor del exitoso The Healthy Keto Plan, Eric Berg.
Incluso, esta disminución se acelera más a partir de los 50 años, se estima que son 11 milímetros de pérdida por año en el caso de los hombres y de 17 milímetros en el de las mujeres, según han observado investigadores de la Universidad de Zúrich.
¿La columna vertebral se comprime?
Una de las primeras causas por la que la estatura se comprime es por la pérdida de agua de los discos intervertebrales, conocidos como las almohadillas cartilaginosas, que evitan que las vértebras de la columna choquen.
La primera razón por la que se reduce la estatura es por la pérdida de agua de los discos intervertebrales, es decir, las almohadillas cartilaginosas que evitan que las vértebras de la columna choquen entre sí durante el movimiento.
Por ejemplo, los discos contienen un 85% de agua en la infancia, por solo un 70% alcanzados los 70 años. Y cuanto menor es su volumen, más cercana es la distancia entre las vértebras, con lo que la columna se ‘acorta’. Un proceso que, además, se acelera con el exceso de peso y con el consumo de tabaco.
¿Por qué los huesos se vuelven menos densos y más frágiles?
Los huesos frágiles son la segunda causa de la pérdida de masa que sufren naturalmente los huesos a partir de los 40. Una disminución de la densidad ósea que, de resultar más acelerada de lo normal, da como resultado la osteoporosis. Y como el hueso es más débil, es más propenso a sufrir pequeñas fracturas.
De este modo, las vértebras, que a consecuencia de estas microrroturas –por lo general, indoloras– pueden comprimirse o cambiar de forma, lo que puede contribuir a una postura más arqueada y, por ende, a una menor estatura.
También, con los años, por el envejecimiento hay una mayor disminución de la masa muscular. Por ejemplo, aquellos músculos con una función postural, encargados de ‘apuntalar’ la columna para mantenerla recta. Así, y dado que los músculos tienen menos fuerza y resistencia, el cuerpo se encorva.
¿Cómo evitar la pérdida de estatura?
Para contrarrestar los signos del envejecimiento en el cuerpo, el doctor Berg que es necesaria una alimentación saludable y ejercicio diario.
Lo primero es seguir una dieta saludable que, entre otros nutrientes como vitaminas y minerales, aporte una cantidad adecuada de calcio que ayude a salvaguardar la densidad ósea.
Por ejemplo, “puedes obtener calcio de las verduras de hoja verde y de productos lácteos orgánicos”, apunta el quiropráctico, que igualmente recomienda la toma de vitamina D para ayudar a absorber este mineral esencial.
Así mismo, el ejercicio se considera beneficioso para la salud y el buen funcionamiento del cuerpo. También los músculos, para lo que los expertos recomiendan hacer flexiones, sentadillas, estocadas y planchas para fortalecer el core.
Finalmente, hay que tener claro que los centímetros perdidos por el envejecimiento no se podrán recuperar, pero con estos hábitos podrá evitar seguir disminuyendo todos los factores mencionados anteriormente que influyen en la pérdida de estatura.