Uno de los alimentos que más beneficios le confiere a la salud ósea del organismo es la yuca, un alimento que debe ser consumido sobre todo por los niños.
Este alimento es un aliado para la digestión y el intestino. Buena parte de su composición es agua, hidratos de carbono y fibra, y aunque no posee grandes cantidades de micronutrientes, es rica en vitamina C, vitamina B1, manganeso o potasio.
Al consumirla, el cuerpo recibe varias propiedades, las cuales tienen efectos depurativos y desintoxicantes. Es recomendada para casos de estreñimiento y de artritis, además de beneficiar a quienes presentan enfermedades de la piel y continuas jaquecas.
La yuca es un excelente alimento para mejorar la digestión, pues se digiere con facilidad y controla el aparato digestivo, con lo cual la persona logra liberarse de las digestiones pesadas.
Los nutricionistas indican que es de gran utilidad para las personas que padecen gastritis, acidez estomacal o colitis.
Las toxinas de la yuca
La yuca jamás se debe comerse cruda, ya que además de ser muy dura, contiene unas sustancias llamadas glucósidos cianogénicos, que cuando se descomponen dan lugar a compuestos tóxicos.
Los glucósidos son degradados por una enzima propia de la planta, dando lugar al ácido cianhídrico, el cual se descompone en acetona y cianuro.
El cianuro en la yuca se sintetiza en la hoja y se transporta a las raíces, donde se divide entre la cáscara y el parénquima.
El cianuro es un tóxico que puede acumularse en el organismo, dando lugar a síntomas leves cuando la intoxicación es aguda, como mareos, dolor de cabeza y trastornos del sueño, o a síntomas mucho más graves cuando la intoxicación es crónica.
En el caso más fuerte los síntomas van desde hormigueo, entumecimiento de los miembros, debilidad muscular, adelgazamiento y problemas de visión.
Para que este alimento pueda estar libre de tóxicos y se pueda comer sin preocupación, es necesario que esté cocinado, ya sea para comelar en sólido o para triturarlo y después prepararlo en puré.
Para esto solo debe sumergir la pieza de yuca en abundante agua con sal, y dejarla hirviendo por 20 minutos. Tenga presente que la yuca puede ser tóxica cuando no se cocina convenientemente. Si la yuca es amarga, debe cocinarse durante más tiempo.
Los problemas que presenta
Si la yuca tiene rayas negras, líneas o cualquier decoloración, debe desecharse. Si está podrida, presentará manchas marrones suaves y un olor pútrido.
Recomendaciones
El contenido en calcio de la yuca, unido al aporte de vitamina K, ayuda a mantener sanos los huesos y previene la presencia de osteoporosis.
De igual forma, la vitamina B6 que posee favorece el cuidado de la piel y del cabello, aportándole vitalidad. Este apreciado alimento también contiene hierro, el cual ayuda a prevenir la presencia de anemia, que se presenta especialmente en las mujeres.
Consumirla a diario no traerá inconvenientes, sino que por el contrario le dará grandes beneficios a su organismo. Eso sí, no olvide que debe estar cocinada correctamente para que pueda perder todas las toxinas.
Recuerde además que la yuca envasada al vacío se debe conservar refrigerada hasta el momento de su consumo, la cual puede llegar a durar entre las 8 y 10 semanas. De esta manera podrá contar con yuca cocida lista para comer de la forma que más le guste, sin la necesidad de esperar a que esta se descongele.