Según científicos, existen personas que pueden ser más propensas a desarrollar ciertas enfermedades en función de su tipo de sangre.

Por ello, un estudio publicado en la revista eLife ha confirmado las conexiones identificadas entre determinados tipos de sangre y el riesgo de padecer coágulos y hemorragias.

Asimismo, la investigación llevada a cabo estableció una nueva conexión entre los cálculos renales y las personas que tienen sangre del tipo B. “Nuestros hallazgos ponen de manifiesto nuevas e interesantes relaciones entre afecciones como los cálculos renales y la hipertensión inducida por el embarazo y el tipo o grupo sanguíneo”, afirmó el autor principal, Gustaf Edgren, profesor asociado de Epidemiología del Karolinska Institutet y médico del Departamento de Cardiología del Hospital Södersjukhuset de Estocolmo (Suecia).

Vale la pena resaltar que investigaciones anteriores evidenciaron que las personas con sangre del tipo A o B tenían más posibilidades de padecer enfermedades cardiovasculares o experimentar un coágulo de sangre que las personas con sangre del tipo O, y que las personas con sangre del tipo O eran más propensas a sufrir una hemorragia.

En el campo de la medicina, se han desarrollado varios estudios que determinan cómo el tipo de sangre puede influir en el desarrollo de una patología. | Foto: Getty Images

Por otro lado, expertos también han afirmado que las personas con determinados tipos de sangre puede ser más susceptibles a algunas enfermedades infecciosas.

Sin embargo, según algunos avances científicos y de investigación, “todavía se dispone de poca información sobre si las personas con grupos sanguíneos RhD positivo o RhD negativo pueden correr el riesgo de padecer ciertas patologías o sobre cuántas enfermedades más pueden verse afectadas por el tipo o el grupo sanguíneo”, explicó Torsten Dahlén, autor principal del trabajo y estudiante de doctorado en el Departamento de Medicina de Solna, en el Karolinska Institutet de Estocolmo (Suecia).

Según especialistas, es clave que las personas conozcan su tipo de sangre. Foto: Getty Images | Foto: © Jonathan Knowles 2015

Un estudio con mil enfermedades

Bajo la controversia, los científicos analizaron a más de cinco millones de personas para encontrar un vínculo entre los tipos de sangre A, B, O y los grupos RhD y más de 1000 patologías. “Hallamos 49 enfermedades vinculadas a los grupos sanguíneos A-B-O y una relacionada al grupo RhD”, afirmaron los investigadores.

  • SANGRE TIPO A

Los investigadores confirmaron que las personas con sangre tipo A tenían más probabilidades de sufrir un coágulo de sangre. De hecho, este estudio confirmó otros resultados con la posibilidad de padecer esta patología.

  • SANGRE TIPO O

Estas pueden sufrir un trastorno hemorrágico. Por otro lado, también observaron que las mujeres con sangre del tipo O y RhD positivo eran más propensas a sufrir hipertensión inducida por el embarazo.

  • SANGRE TIPO B

Los investigadores descubrieron una nueva conexión entre tener sangre del tipo B y un menor riesgo de desarrollar cálculos renales.

Al comienzo de la pandemia, los médicos comenzaron a notar patrones entre ciertos tipos de sangre de los pacientes y la gravedad de la enfermedad. BBC - GETTY | Foto: BBC - GETTY IMAGES

Aunque los autores reconocen que es necesario llevar a cabo más estudios para confirmar los resultados y comprobar cómo los diferentes tipos o grupos de sangre pueden aumentar el riesgo de padecer ciertas enfermedades, estos hallazgos son muy importantes. “Sientan las bases de futuros estudios para identificar los mecanismos que subyacen al desarrollo de la enfermedad, o para investigar nuevas formas de identificar y tratar a los individuos con determinadas afecciones”, concluyeron.

¿Algún tipo de sangre incrementa las posibilidades de perder la memoria?

Un estudio científico realizado por investigadoras de la Facultad de Medicina de la Universidad de Vermont, que fue publicado en la revista médica de la Academia Estadounidense de Neurología, Neurology, analizó la relación entre el tipo de sangre de las personas y los problemas en la capacidad de recordar distintos eventos.

La investigación hizo parte de un estudio de mayor escala conocido como Razones de las diferencias geográficas y raciales en el accidente cerebrovascular (Regards), que se llevó a cabo a partir del seguimiento a cerca de 30.000 individuos por más de tres años. Durante el estudio, identificaron que 495 personas que no tenían ningún problema de memoria al comienzo desarrollaron un deterioro cognitivo.

Cabe destacar que el desempeño de las personas se comparó con el de otras 587 que se mantuvieron sanas durante los análisis de los investigadores. Entre otras cosas que fueron medidas por los autores del estudio estuvo el tipo de sangre que tenían las personas que desarrollaron problemas con su memoria.

“Las personas que tenían el tipo de sangre AB, en comparación con el resto de la población, tenían 82 % más de riesgos de presentar dificultades con su pensamiento y el desarrollo de la memoria que, a la larga, podrían provocarles demencia”, concluyeron los investigadores.

Por otro lado, la Universidad de Vermont en un comunicado de prensa indicó que estudios anteriores han demostrado que las personas con sangre tipo O tienen un menor riesgo de enfermedad cardíaca y accidente cerebrovascular, factores que pueden aumentar el riesgo de pérdida de memoria y demencia”.

Sus análisis, adicionalmente, mostraron que en el grupo de las personas que mostraron un deterioro cognitivo el 6 % pertenecían al grupo sanguíneo AB.