Compartir productos de higiene no es para nada recomendable, ya que aunque crea que a quien se lo estpa presentando es una persona limpia, lo cierto es que cada uno tiene sus bacterias y sus ‘males’. Una herida en la piel podría ocasionar graves daños a su organismo.
La siguiente es una lista de elementos de higiene personal que por nada del mundo debe compartir. Recuerde que si lo que busca es seguir cuidando su piel, en ese caso opte por comprar otros productos que pueda tener a la mano en caso de que su compañero o algún familiar los necesite.
Y es que aunque usted crea que el jabón es un elemento limpio, lo cierto es que puede acumular bacterias que se pueden transmitir de una persona a otra al compartir su uso.
Si lo llega a compartir, al jabón pueden adherirse parte de los microorganismos y suciedad, los cuales se van acumulando.
En condiciones normales, estos microorganismos son inofensivos., pero si llegan a entrar en contacto con alguna herida o lesión de la piel podrían ocasionar infecciones y dificultar el proceso de curación.
Es sí tenga presente que las personas con piel sensible pueden desarrollar ciertos signos de alergia a los jabones compartidos, por lo que debes estar pendiente si llega a presentar sequedad en la piel, erupciones o comezón.
Para evitar estas situaciones es recomendable:
- Usar jabón líquido. Al usar los de tipo líquidos, el único momento de contacto es al presionar para obtener el jabón.
- Tenga su propia pastilla de jabón de baño. Y no permita que nadie más la utilice. Es importante que además de tener una pastilla de jabón personal, evite dejarla en ambientes húmedos. Una vez usada, colóquela en una superficie ventilada, ya que de lo contrario, estará generando un ambiente excelente para la reproducción de microorganismos.
Otras recomendaciones
Desodorante
No es extraño que ya dispuesto para empezar una mañana activa, descubra que el desodorante se le terminó y pida un poco a quien tenga cerca.
Pero este es otro de los productos que no se debe compartir. Los desodorantes los puede encontrar en distintas presentaciones: en geles, en aerosoles, roll-on, en crema y en barra.
Los que son en aerosol son los únicos productos de higiene personal que puede compartir, sobre todo porque generalmente se aplican a una distancia de entre 20 o 30 centímetros de la piel.
En cambio el resto de las presentaciones no es bueno compartirlas, pues incluso si se baña antes de aplicar el desodorante, en las axilas existen microbios y células muertas que se quedarán en el desodorante.
Tenga en cuenta que esta clase de productos crea un pequeño ecosistema microbiótico, y cuando esos microbios entran en contacto con un cuerpo al que no están habituados pueden llegar a desencadenar alteraciones.
En este caso lo recomendable es vigilar el consumo de desodorante, con ello podrá comprar uno de repuesto algunas semanas o días antes de que se termine el actual.
Si en caso tal al momento de requerirlo no cuenta con el producto, entonces puede aplicarse un poco de bicarbonato o jugo de limón.
La cuchilla de afeitar
Otro de los productos que no debe compartir por nada del mundo son las cuchillas, sobre todo porque al tener hojas afiladas que entran en contacto directo con la piel, puede ocasionar pequeños cortes que dejan restos de sangre en ella, lo que al compartirla se convierte en algo sumamente peligroso.
Es necesario mencionar que los microorganismos que están presentes en esa sangre y en las células muertas, pueden ocasionar un contagio de graves infecciones como la hepatitis.
Además, con una cuchilla prestada usted no tiene seguridad de que cuando la vuelva a usar la encuentre en buenas condiciones., sobre todo por el hecho de que no todos son igual de cuidadosos con esta clase de artículos.
La esponja de baño
Precisamente esas bacterias con las que pueden causar problemas en la piel, infecciones y hasta cambios de apariencia.
Es recomendable que una vez que termine de bañarse, guarde la esponja de tal forma que esta se seque, ya que un error muy común es guardar las esponjas en una bolsa o recipiente plástico, pues allí se mantendrán mojadas hasta el siguiente uso.
Esa humedad llevará a que las bacterias se reproduzcan y reducirá la vida útil de la esponja.
Recuerde que debe lavar la esponja al menos una vez por semana con un poco de detergente para ropa o champú y enjuagarla bien. Antes de usarla, debe dejar que seque perfectamente.
El cepillo de dientes
Si su pareja suele olvidar su cepillo de dientes y utiliza el tuyo, lo recomendable es que compre un segundo cepillo para que ella pueda usarlo cuando lo visite.
Resulta que en la boca se alojan varios microorganismos en grandes cantidades, y es precisamente por eso que se usa el cepillo varias veces al día para evitar que se ocasionen problemas como el mal aliento o la caries.
Un consejo es dejar al menos dos veces por semana su cepillo por varias horas dentro de un poco de enjuague bucal para matar las bacterias.