El cáncer es una enfermedad común en el mundo. Según las cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS), nada más en 2020 se registraron 10 millones de fallecimientos por este diagnóstico; incluso, se llegó a la conclusión que en países de ingresos bajos y medios tienen un 30 % de muertes relacionadas con este tipo de padecimiento, incluyendo la hepatitis o el papilomavirus humanos.
Entre tanto, la American Cancer Society explicó que uno de cada 10 estadounidenses están muriendo por cáncer, y a reglón seguido aseguró que esta enfermedad se da cuando las células del cuerpo no siguen las leyes naturales, y se comienzan a producir anomalías en los procesos de reproducción.
“Cuando una célula presenta alguna anomalía o ha envejecido, por lo general la célula perece (muere). El cáncer surge cuando algo sale mal en este proceso, ocasionando que las células anormales se reproduzcan y las células viejas no perecen como debería suceder”, indicó la organización.
Después de esto, el cuerpo comenzaría a reproducir de manera descontrolada las células irregulares, hasta que estas superen las sanas y, de esta forma, el organismo termina colapsando al no poder funcionar correctamente con las células cancerígenas, recoge la organización.
Entre tanto, se recalcó que existen muchos tratamientos que han ayudado a las personas que padecen este diagnóstico a tener una vida plena, reduciendo los síntomas molestos y el avance de la enfermedad.
Los tipos de cáncer más comunes, según las cifras de la OMS, son el de mama, el pulmonar, el colorrectal, de próstata, de piel (no melanoma) y gástrico. Empero, entre los más mortales para el 2020 se encuentran el pulmonar, en primer lugar, seguido por el colorrectal, el hepático, el gástrico y el de mama.
Y los síntomas que más frecuentemente aparecen y que son alarmantes ante un posible caso de cáncer son el cambio en las evacuaciones, como sangre, diarrea o estreñimiento, entre otras; esto puede ser una alerta ante una afección de tipo cancerígeno en el colon, de acuerdo con la información de la organización Ucsf Health, de la Universidad de California, en San Francisco, Estados Unidos.
Otro síntoma que indica un posible cáncer en el ovario o el cuello uterino es el dolor en la zona de la pelvis y las menstruaciones anormales, a esto se le suma la hinchazón que no desaparece por más de dos semanas.
Con respecto a esta enfermedad presente en la mama, se aclaró que cualquier tipo de cambio en los senos puede ser señal de un cáncer en desarrollo, como bultos, supuraciones, cambios en la piel, entre otros.
El dolor de cabeza severo, tos crónica -en ocasiones con sangre-, las cuales se mantienen por más de dos semanas; dificultad para tragar los alimentos o líquidos que perduren en el tiempo; llagas en la boca; fiebre o infecciones que tienden a ser constantes y que se mantienen en el largo plazo; moretones frecuentes e inusuales que salen de la nada, son otros de los síntomas de esta enfermedad, según indica la Ucsf Health.
Según la OMS, “el tratamiento consiste en radioterapia, quimioterapia y/o cirugía. Definir los objetivos del tratamiento es un primer paso importante. El objetivo principal es generalmente curar el cáncer o prolongar la vida de forma considerable”, sobre las formas en como se trata la enfermedad.
- No fumar y mantenerse alejado del humo de las personas que lo hagan.
- Moderar el consumo de alcohol.
- Proteger la piel de la sobreexposición a los rayos solares. Evitar el uso de cámaras bronceadoras.
- Comer muchas frutas y verduras.
- Mantener un peso saludable. Para esto es importante tener una dieta balanceada y ejercitarse regularmente.