La moringa, también llamada árbol de la vida, es una planta medicinal que en muchas partes del mundo es utilizada para ayudar a controlar los niveles de azúcar en la sangre, tratar algunas enfermedades respiratorias, disminuir la ansiedad y favorecer la pérdida de peso.
Esta planta posee un elevado contenido de vitaminas y minerales como hierro, carotenoides, vitamina C, polifenoles y quercetina, que le confieren un efecto antioxidante y antiinflamatorio, según información del portal Nutrición y Farmacia.
Su parte más utilizada es la hoja y es allí en donde se encuentra la mayor concentración de antioxidantes, pudiendo ser consumidas en forma de té, cápsulas o polvo. Además de las hojas, pueden consumirse sus semillas y otra de las formas de usarla es en aceite.
Se dice que esta planta sirve para aumentar la capacidad respiratoria y que podría ayudar a aliviar los síntomas y la severidad de los ataques de asma, de acuerdo con análisis científicos. El portal de salud y bienestar Tua Saúde cita un estudio en el cual se determinó que los participantes que tomaron moringa de manera regular mejoraron su capacidad respiratoria debido a que se registró un aumento en la hemoglobina.
De igual forma, la moringa podría ayudar en el control de la diabetes debido a que posee propiedades que ayudan a regular el estrés oxidativo gracias a sus propiedades antioxidantes, que evitan el daño que causan los radicales libres a las células y a su vez favorece la disminución de los niveles de azúcar en sangre.
Una de sus bondades es que ayuda a cuidar la salud del corazón. Al ser rica en fibras, el consumo de moringa evitaría la absorción de colesterol en el intestino. “Además, esta planta posee diversos compuestos bioactivos, como la quercetina y polifenoles, que actúan como antioxidantes y reducen la inflamación crónica, disminuyendo así el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares”, precisa el portal de bienestar y salud Tua Saúde.
De igual forma, gracias a su contenido de polifenoles, y flavonoides, la moringa contribuye a regular la presión arterial, ya que estos compuestos le otorgan propiedades vasodilatadoras, que ayudan a relajar las arterias y mejorar la circulación de la sangre, precisa Nutrición y Farmacia.
Al respecto de sus propiedades, el doctor Mark Olson, del Instituto de Biología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) explicó: “Lo que ofrece la moringa en sus hojas es proteína. Cada una contiene 30 % de proteína y esta tiene mucho calcio, vitamina A y se usa en programas para evitar ceguera infantil”.
Además, esta planta natural posee diversas propiedades que aportan beneficios para la salud y, según el portal portugués de salud, nutrición y bienestar Tua Saúde, se puede utilizar para:
- Aumentar la capacidad respiratoria y con ello combatir enfermedades como el asma.
- Prevenir la diabetes. La moringa posee propiedades que ayudan a regular el estrés oxidativo, el cual reduce los niveles de azúcar en la sangre, mejorando la protección contra el daño celular.
Una de las formas más tradicionales de consumir la moringa es en té. Para ello, se pone una taza de agua al fuego y cuando esté a punto de ebullición se añaden tres cucharaditas de hojas secas, se retira del fuego, se deja reposar durante cinco minutos. Luego se cuela y se endulza con miel al gusto.
Otra forma de ingerir la moringa es en sus semillas, las cuales deben descascarse y tragarse como si fuera una pastilla, con un vaso de agua. Lo ideal es no consumir más de tres semillas al día. Por último, las cápsulas que pueden adquirirse en tiendas naturistas. La recomendación es tomar entre una y dos cápsulas al día, junto con las comidas.