Muchas personas con el paso de los años experimentan pérdida de memoria, lo cual puede suceder por diversas causas, muchas de ellas relacionadas con el estado de ánimo. De acuerdo con el portal de salud portugués, Tua Saúde, la depresión, ansiedad, alteraciones del sueño, uso de medicamentos, entre otros, pueden ser motivos de pérdida de la memoria.
Además de estos, existen enfermedades neurodegenerativas que afectan la memoria, como es el caso del Alzheimer. El mencionado portal de salud afirma que “la mayoría de las causas son prevenibles o reversibles, mediante hábitos de vida como meditación, técnicas de relajamiento”.
Hábitos que dañan la memoria
Uno de los hábitos que pueden perjudicar las funciones cerebrales es hacer muchas cosas al mismo tiempo. En el mundo globalizado e inmediatista actual, es común que las personas deban trabajar en diferentes tareas, cuidar de la familia, pasar tiempo con amigos y realizar las labores domésticas, por lo que en ocasiones y para cumplir con todas las obligaciones, se come mientas trabaja o se cuida a los hijos mientras se terminan actividades laborales.
Por ello, Charan Ranganath, director del Laboratorio de Memoria Dinámica de la Universidad de California y estudioso del cerebro, asegura que en lugar de ser más productivos, al realizar múltiples tareas simultáneamente es más difícil concentrarse y se reduce la efectividad.
Además, al tener tantas ocupaciones y poco tiempo para el descanso y el ocio, es más probable que las personas padezcan problemas físicos y mentales asociados al agotamiento, el estrés y la ansiedad, produciendo frustración.
No dormir lo suficiente es otro de los hábitos que dañan la memoria, pues cuando el cerebro no descansa se le imposibilita la reparación de las neuronas, células que activan los recuerdos y se conectan entre sí para preservar la memoria.
Según Ranganath, la falta de sueño es “devastadora” para corteza prefrontal, por lo que los recuerdos se fragmentan. De acuerdo al portal de salud “un mejor sueño puede obtenerse por medio de hábitos realizados con regularidad, como adoptar una rutina para acostarse y levantarse, evitar el consumo de café después de las 17h, además de evitar el uso del celular o ver televisión en la cama. En casos más graves, el médico puede prescribir ansiolíticos”.
Para evitar daños en la memoria y mejorar sus hábitos, es importante consumir alimentos ricos en omega 3, como salmón, pescados de agua salada, semillas y aguacate. Una buena alimentación contribuye a mejorar la memoria y la concentración, por lo que también debe agregar a su plan de alimentación una correcta hidratación.