Según una reciente investigación publicada por Journal of the American Heart Association, la revista científica de la Asociación Americana del Corazón, una taza de café y el consumo diario de té verde no aumentan el riesgo de muerte relacionada con enfermedades cardiovasculares en ninguna medición de la presión arterial, aunque ambas bebidas contienen cafeína.
El estudio detalla que una taza de 8 onzas de té verde o negro contiene entre 30 y 50 miligramos de cafeína, y una taza de 8 onzas de café, entre 80 y 100 miligramos.
Por otra parte, investigaciones realizadas anteriormente indicaban que tomar una taza de café al día puede ayudar, a quienes han sufrido infartos de corazón, a reducir el riesgo de muerte tras el evento. Además, esta bebida puede prevenir infartos o derrames cerebrales en personas sanas.
De la misma manera, el doctor Donald Hensrud, presidente de la División de Medicina Preventiva, Ocupacional y Aeronáutica, afirma que los estudios encontraron una posible asociación entre el café y la disminución de la mortalidad. El café puede ofrecer alguna protección contra “la enfermedad de Parkinson, diabetes tipo 2 y enfermedad hepática, incluido el cáncer de hígado”.
Además, el consumo de café puede ayudar a controlar el apetito y reducir el riesgo de depresión o aumentar el estado de alerta, aunque no está claro si este efecto se debe a la cafeína o a algún otro componente del café. En cuanto a los efectos nocivos, un exceso de esta bebida puede elevar la tensión arterial y provocar ansiedad, palpitaciones y dificultad para dormir.
Hiroyasu Iso, profesor emérito de la Universidad de Osaka, Japón, realizó una investigación sobre los efectos del café en personas con hipertensión. “Nuestro estudio pretendía determinar si el conocido efecto protector del café se aplicaba también a personas con distintos grados de hipertensión y examinó los efectos del té verde en la misma población. Hasta dónde sabemos, este es el primer estudio que encuentra una asociación entre beber dos o más tazas de café al día y la mortalidad por enfermedades cardiovasculares entre personas con hipertensión grave”, comentó el experto.
La presión arterial alta es una enfermedad que afecta a las arterias del cuerpo y se conoce como hipertensión. Con esta condición médica, la fuerza que ejerce la sangre contra las paredes de las arterias es muy alta constantemente y el corazón debe trabajar más para bombear sangre.
“La presión arterial se mide en milímetros de mercurio (mm Hg). En general, la hipertensión se corresponde con una lectura de la presión arterial de 130/80 mm Hg o superior”, según la Clínica Mayo.
Los resultados del estudio revelan que tomar dos o más tazas de café al día se asoció con el doble de riesgo de muerte por enfermedad cardiovascular en personas con una presión arterial de 160/100 mm Hg o mayor en comparación con las que no tomaban café.
Por su parte, una taza de café diaria no se asoció a un mayor riesgo de muerte por enfermedades del corazón y el consumo de té verde “no se asoció a un mayor riesgo de mortalidad por enfermedad cardiovascular en ninguna de las categorías de presión arterial”.
“Estos resultados podrían respaldar la afirmación de que las personas con hipertensión grave deberían evitar el consumo excesivo de café. Dado que las personas con hipertensión grave son más susceptibles a los efectos de la cafeína, los efectos nocivos de la cafeína pueden superar sus efectos protectores y aumentar el riesgo de muerte”, ha resaltado Hiroyasu Iso.
Los beneficios del té verde pueden explicarse por la presencia de polifenoles, micronutrientes con propiedades antioxidantes y antiinflamatorias saludables que se encuentran en las plantas.