La salud ósea es crucial para llevar un estilo de vida activo. Para fortalecer estas partes del cuerpo es fundamental adquirir buenos hábitos como el ejercicio y una dieta con nutrientes apropiados.
Según expertos, realizar por lo menos 150 minutos de actividad física a la semana ayuda a evitar la aparición de enfermedades crónicas como la obesidad, la diabetes y además ayuda a disminuir el colesterol.
Sin duda, mantener un sistema óseo fortalecido es importante a cualquier edad, pero se vuelve algo esencial a medida a que la edad aumenta. Según un estudio realizado por la Universidad de Harvard, el ejercicio es crucial para las personas que padecen de osteoporosis.
“Los huesos, como los músculos, son tejidos vivos que responden al ejercicio y se fortalecen”, así lo indicó dicha universidad.
Los resultados del estudio arrojaron que existe una serie de ejercicios que exigen al cuerpo a trabajar contra la gravedad, lo que a su vez permite que se fortalezcan los huesos.
Harvard Health recomendó caminar, subir escaleras, jugar tenis y bailar, son buenos ejercicios, pero debe tener presente que las actividades de mayor impacto fortalecen mejor los huesos.
Sin embargo, recuerde que es de suma importancia hablar con su médico de confianza para que le dé su consejo profesional sobre qué actividad física es la ideal para su caso.
Las comidas que ayudan a los huesos
Por otra parte, como se dijo anteriormente, la dieta también es de gran influencia al momento de padecer de esta enfermedad de los huesos, existen ciertos alimentos con nutrientes específicos que ayudan a fortalecer el sistema óseo del organismo.
Entre los nutrientes más recomendables para que sus huesos siempre permanezcan fuerte están el calcio y la vitamina D.
Entre los alimentos que más contienen dichos nutrientes se encuentra la leche y sus derivados. Los productos lácteos como la leche, el queso y el yogur son fuentes de calcio de alta calidad. Este nutriente es fundamental para el fortalecimiento de los dientes. Cabe resaltar que a las mujeres mayores de 50 años y los hombres mayores de 70 deben apuntar a consumir cerca de 1,200 mg diarios.
La carne de polo también es gran ayuda a fortalecer el tejido del hueso. Esto gracias a su alto contenido de vitamina B6, niacina, zinc, ácido fólico y fósforo, que son importantes para la salud ósea.
Por otra parte, entrenado en el campo de las frutas, existen varias que aceleran la regeneración del sistema óseo y fortalece de posibles fracturas. Se trata de la naranja, la cual posee vitamina C. Esta sustancia es primordial para la formación de colágeno, además, contiene ácidos hidroxicinámicos que fortalecen las articulaciones.
En este orden de ideas, la uva emerge como una excelente fuente antioxidante, diurética, energética e incluso, puede ayudar a prevenir la osteoporosis. Asimismo, actúan como un potente antioxidante natural, de manera que ayuda a combatir el envejecimiento prematuro provocado por los radicales libres. Además, su alto contenido boro ayuda a mejor la calidad del calcio en los huesos.
Otro de los beneficios de la uva en el organismo es que es una poderosa fuente de energía, propicia para ingerir antes de hacer actividad física. Esto gracias a su alto nivel de azúcares y carbohidratos. Esta propiedad aumenta si se ingieren en su presentación en forma de pasas.
Por último, una de las propiedades más valiosa de las uvas es u capacidad diurética, la cual le permite influir directamente en los síntomas de casos de hiperuricemia o gota y litiasis renal. Las cuales se caracterizan por su retención de líquidos en partes específicas del cuerpo, como articulaciones en el caso del ácido úrico o riñones.
Además de consumir este tipo de alimentos, también puede acceder a vitamina D y calcio a través de suplementos vitamínicos, para esto debe visitar a su médico para que le realicen exámenes de rutina y le recomiende la mejor elección según cada caso.