Son precisamente ellas las que juegan un papel importante en el estado de salud de la piel. Los seres humanos necesitan 13 tipos de vitaminas que actúan en el organismo de diferentes maneras. En caso de que haya una deficiencia de estas vitaminas, aparecerán las temidas manchas y las inevitables arrugas.
Vitamina A:
Es de las mejores para evitar las arrugas en la piel, para evitar las manchas y el acné.
Vitamina C:
Tiene el poder de aclarar la piel y es un antioxidante. Ayuda a combatir los radicales y mejora el proceso de cicatrización, protege a la persona de los efectos nocivos del sol en la piel y previene futuras manchas.
Vitamina E:
Activa la circulación sanguínea y retrasa el envejecimiento, es antioxidante, protege a la piel del sol y la contaminación.
Vitamina D:
Procede mayormente del sol y es clave para el buen funcionamiento del organismo.
Vitamina K:
Mejora la circulación sanguínea, lo que reduce las ojeras oscuras, disimula las venas y combate los problemas de la piel.
En los bebes
A diferencia de los adultos, la aparición de manchas blancas en la piel de los bebés o los niños no está relacionada con la dieta o con el déficit de una vitamina en concreto. Para la pediatra del equipo de Criar Con Sentido Común, Gloria Colli, no existe ninguna relación entre un supuesto déficit de vitaminas y las manchas blancas en la piel.
En cambio, las manchas blancas en las uñas sí pueden estar relacionadas con la falta de nutrientes, vitamina A y B6 o proteínas. Las manchas blancas en la piel de un bebé pueden deberse a razones benignas, las cuales pueden estar relacionadas con la disminución o pérdida de melanina.
Falta de vitamina B12, vitamina D y E
La aparición de manchas se suele relacionar con la falta de varios tipos de vitaminas. Por una lado, la vitamina B12 y por otro la vitamina D y la E.
La vitamina B12 es muy importante para el metabolismo de proteínas, ya que ayuda a la formación de glóbulos rojos en la sangre y al mantenimiento del sistema nervioso central.
Esta vitamina es del tipo hidrosoluble, la cual se puede almacenar en el hígado durante varios años. Es necesario mencionar que el cuerpo solo se queda con una reserva y las sobrantes salen del organismo a través de la orina. En cambio la vitamina D ayuda al cuerpo a absorber el calcio, lo que es vital para los huesos.
Este tipo de vitamina juega un papel importante para el sistema nervioso, el inmunitario y para los músculos. Se puede encontrar en los alimentos y suplementos, pero la vía más directa es el sol, el cual puede llevar a provocar que el cuerpo genere vitamina D de una manera mucho más natural.
La vitamina E en cambio es un antioxidante que protege el tejido corporal de todos aquellos daños causados por los radicales libres. También es la encargada de reforzar el sistema inmunitario, de ayudar a formar los glóbulos rojos y sobre todo contribuye al mantenimiento de los vasos sanguíneos.
Es aquella que ayuda a utilizar la vitamina K y facilita la interacción entre células. El cuerpo es el encargado de almacenar la vitamina E en el tejido graso y en el hígado. Los especialistas señalan que en ningún caso la carencia de ellas se encuentra relacionada con las manchas blancas de la piel de un bebé.
A pesar de ello no hay que olvidar que la alimentación de un bebe es de vital importancia, sobre todo al momento de proporcionar una dieta sana y equilibrada, que garantice el desarrollo y crecimiento de los niños.